Bloomberg — El ente regulador de los medicamentos en Europa ha iniciado una revisión para determinar si un tratamiento contra la calvicie en los hombres puede estar relacionado con pensamientos y conductas suicidas.
La revisión de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) sobre la finasterida, que está disponible tanto en forma de píldora como de solución que se aplica directamente sobre la piel, es consecuencia de la inquietud que ha despertado la posible relación entre dicho fármaco y los pensamientos suicidas.
La finasterida también puede usarse para tratar el agrandamiento de la próstata. Otro fármaco, denominado dutasterida, que también se emplea para tratar el agrandamiento de la próstata, está siendo igualmente examinado por la EMA.
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Los medicamentos que contienen finasterida y dutasterida administrados por vía oral conllevan un “riesgo probado de efectos secundarios psiquiátricos, entre ellos la depresión”, señaló la autoridad reguladora en un comunicado. Las ideas suicidas ya se han incorporado como posible efecto secundario en la información sobre los productos de dos medicamentos que contienen finasterida: Propecia y Proscar.
En la actualidad, la EMA dice que revisará todos los datos para decidir si las autorizaciones de estos fármacos se deben mantener, modificar, suspender o retirar en la Unión Europea.
Mientras tanto, el organismo regulador de medicamentos de Gran Bretaña advirtió a los hombres que toman finasterida que “estén atentos” a los posibles efectos secundarios psiquiátricos y sexuales. La Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido dijo en abril que este año se introduciría una nueva tarjeta de alerta para pacientes en los paquetes de finasterida. En el Reino Unido sólo está autorizada la finasterida oral, no el producto tópico.
La finasterida genérica está disponible en varios fabricantes; las marcas Proscar y Propecia son producidas por Merck (MRK), conocida como MSD fuera de América del Norte.
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