Bloomberg — Wells Fargo & Co. (WFC) asumió un cargo por despido de US$647 millones en el cuarto trimestre, mientras el CEO Charlie Scharf continúa reduciendo su plantilla como parte de unos esfuerzos más amplios para recortar costos y rehacer el banco.
Los gastos no financieros ascendieron a US$13.900 millones en los tres últimos meses de 2024, un 12% menos que un año antes. La empresa con sede en San Francisco espera que los ingresos netos por intereses, que batieron las estimaciones en el trimestre, aumenten entre un 1% y un 3% este año, un incremento mayor que el previsto por los analistas.
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"Todavía estamos en las primeras etapas de ver los beneficios del impulso que estamos construyendo, y nuestro rendimiento financiero debería seguir beneficiándose del trabajo que estamos haciendo para transformar la empresa", dijo Scharf en un comunicado el miércoles.
Las acciones de Wells Fargo, que han subido un 50% en los últimos 12 meses hasta el martes, subían un 3% a las 6:54 de la mañana en las primeras operaciones de Nueva York. Las acciones han conservado en gran medida las ganancias impulsadas por el resultado electoral de noviembre, ya que los inversores esperan que el presidente electo Donald Trump relaje las regulaciones y exprima la economía.
Wells Fargo inicia el miércoles las ganancias del cuarto trimestre de la gran banca junto a sus rivales JPMorgan Chase & Co. (JPM), Goldman Sachs Group Inc. (GS) y Citigroup Inc. Los inversores están ansiosos por conocer detalles sobre cómo afectaron los recortes de tasas de la Reserva Federal a los resultados de los bancos, así como las perspectivas de los ejecutivos sobre la economía y la administración entrante de Trump.
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Los inversores bancarios tienen la esperanza de que los recortes de tasas ayuden a aliviar la presión de los elevados costes de financiación, y de que las empresas sean capaces de atraer de nuevo a los prestatarios que se han visto disuadidos por los préstamos caros.
El cuarto mayor banco de EE.UU. sigue bajo un tope de activos impuesto por la Fed, que lo limita a su tamaño de finales de 2017. La firma entró en una nueva fase de su esfuerzo por escapar del límite el año pasado, cuando presentó al banco central una revisión por terceros de sus revisiones, según informó Bloomberg News en septiembre. A finales de año, los activos totales de Wells Fargo ascendían a 1,93 billones de dólares.
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La firma dijo que espera que los gastos sin intereses de 2025 sean de unos US$54.200 millones, ligeramente por debajo del total del año pasado.
Scharf dijo en diciembre que Wells Fargo sigue siendo "extremadamente ineficiente" y que recortar gastos es como "pelar una cebolla". La plantilla, que era de casi 272.000 empleados a finales de 2019, era de 217.502 a finales de año.
Las comisiones de banca de inversión subieron un 59% respecto al año anterior, hasta los 725 millones de dólares en el cuarto trimestre. Desde que asumió el cargo en 2019, Scharf ha tratado de aumentar la presencia de Wells Fargo en Wall Street, y dijo el año pasado que la oportunidad está “mirándonos a la cara.”
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