Bloomberg — SpaceX recibió un contrato del Pentágono para ampliar el acceso de Ucrania a una versión más segura y militarizada de su red de satélites Starlink, profundizando la implicación de la compañía en el conflicto a pesar de la ambivalencia de su fundador, Elon Musk, sobre la guerra.
El contrato significa que 2.500 terminales Starlink que ya están en Ucrania obtendrán acceso a Starshield, una señal clasificada y encriptada a través de Starlink que es más difícil de piratear o interferir. Ese número se suma a los 500 que ya estaban conectados a Starshield.
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“Un total de 3.000 terminales reciben servicio a través de los dos contratos”, según una declaración a Bloomberg News de la Oficina de Satélites Comerciales del Mando de Sistemas Espaciales. Los contratos comparten un propósito común “facilitar la conectividad a Internet en Ucrania”, decía. “Ambos proporcionan servicio hasta 2025″.
El contrato, hasta ahora no revelado, se adjudicó en agosto, antes de que Donald Trump ganara las elecciones de 2024 y de que el presidente Joe Biden lanzara una oferta para aumentar la ayuda militar a Ucrania. Biden ha tratado de dar a Ucrania más influencia en previsión de que Trump presione al presidente Volodymyr Zelenskiy para que negocie con Rusia el fin del conflicto.
El Mando de Sistemas Espaciales declinó revelar el valor en dólares del nuevo contrato, aunque el anterior acuerdo de 500 terminales del Mando Europeo de EE.UU. fue de unos US$40 millones. SpaceX no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
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El futuro de la ayuda estadounidense a Ucrania -y del papel de SpaceX en ella- es incierto. Musk, la persona más rica del mundo, se ha convertido en un asesor clave de Trump, y este ha prometido poner fin rápidamente a la guerra entre Ucrania y Rusia.
Musk tiene su propia historia complicada con Ucrania. En 2022, amenazó con cortar el apoyo financiero a Starlink allí, diciendo que su empresa no podía soportar los costos indefinidamente. También dijo que los terminales no estaban destinados a un uso militar y afirmó en un tuit “no permitiremos una escalada del conflicto que pueda llevar a la 3ª Guerra Mundial”.
Casi al mismo tiempo, Musk irritó a la administración Biden al ofrecer una propuesta de paz que cedería Crimea a Rusia y reharía las elecciones en las zonas de Ucrania tomadas por Rusia. Y en octubre, el Wall Street Journal informó de que Musk ha estado en contacto regular con el presidente ruso Vladimir Putin desde 2022.
Musk ha rechazado las acusaciones de que se ha convertido en un apologista de Putin y ha dicho que sus empresas “han hecho más por socavar a Rusia que cualquier otra cosa”.
Poco después de las elecciones, Musk se unió a una llamada entre Trump y Zelenskiy, destacando su influencia. Una persona familiarizada con la llamada dijo que Zelenskiy agradeció a Musk el sistema Starlink, que ha mantenido a Ucrania conectada desde que comenzó la guerra en febrero de 2022.
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El nuevo contrato se adjudicó en el marco del programa “Órbita Baja Proliferada” de la Fuerza Espacial, que aprovecha los servicios de comunicaciones de los satélites que orbitan entre 100 millas y 1.200 millas (160 kilómetros y 1.900 kilómetros) por encima de la Tierra.
La cartera de SpaceX
El contrato de agosto se suma modestamente a la creciente cartera de negocios de SpaceX con el Pentágono, encabezada por sus contratos para lanzar satélites militares en competencia con una alianza de Boeing Co (BA) y Lockheed Martin Corp (LMT). La empresa Blue Origin LLC, respaldada por Jeff Bezos, también podría obtener la aprobación para competir por los lanzamientos.
Aunque el papel de Musk como colíder del “Departamento de Eficiencia Gubernamental” asesor de Trump puede plantear dudas sobre su influencia en las políticas del Pentágono, las operaciones diarias de SpaceX están dirigidas por el presidente de la compañía, Gwynne Shotwell, que trata directamente con los funcionarios del Pentágono y de la Fuerza Espacial.
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El gobierno ucraniano dijo que no podía facilitar el número total de terminales Starlink que funcionan actualmente en Ucrania. Pero su ministro digital ha dicho que el gobierno contrató 47.000 de ellos antes de la invasión rusa. En mayo de 2022, Ucrania había recibido 10.000 terminales Starlink, según declaró ese mes Mykhailo Fedorov, ministro de Transformación Digital.
El uso de Starlink en conflictos ha llamado la atención de China, otro adversario de EE UU.
Los militares chinos han estado prestando "mucha atención al uso eficaz de las redes de satélites constelados en la guerra, como Starlink, que se han utilizado para asegurar las comunicaciones de los militares ucranianos en medio de los ataques de Rusia", según el último informe anual de la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad EEUU-China, creada por mandato del Congreso.
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