Sanciones de EE.UU. frenan avances de chips de Huawei y China queda rezagada en IA

Restricciones de EE.UU. impiden que los socios fabricantes de chips de Huawei adquieran sistemas de litografía ultravioleta extrema de última generación

Huawei tiene previsto desvelar su Mate 70 de próxima generación el 26 de noviembre.
Por Gao Yuan - Debby Wu
19 de noviembre, 2024 | 03:25 PM

Bloomberg — Las ambiciones de Huawei Technologies Co. de crear chips más potentes para la inteligencia artificial (IA) y los teléfonos inteligentes se han topado con importantes obstáculos debido a las sanciones de EE.UU., lo que ha paralizado un importante esfuerzo chino por equipararse a la tecnología estadounidense.

Huawei está diseñando sus dos próximos procesadores Ascend, su respuesta a los aceleradores dominantes de Nvidia Corp. (NVDA), en torno a la misma arquitectura de 7 nanómetros que ha sido la corriente principal durante años, dijeron personas familiarizadas con el asunto. Esto se debe a que las restricciones impuestas por EE.UU. impiden que los socios fabricantes de chips de Huawei adquieran sistemas de litografía ultravioleta extrema de última generación de ASML Holding NV (ASML).

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Eso significa que sus chips estrella se quedarán atascados en tecnología anticuada hasta al menos 2026, dijeron las personas, que pidieron permanecer sin identificar al hablar de un proyecto sensible. Los procesadores de los teléfonos inteligentes de Huawei, para la línea Mate, se enfrentan a limitaciones similares, dijo una de las personas.

El estancamiento de Huawei tiene implicaciones no solo para su negocio, sino también para las ambiciones más amplias de China en materia de IA. Sus luchas sugieren que el país se quedará aún más rezagado con respecto a EE.UU. en 2025, cuando Taiwan Semiconductor Manufacturing Co (TSM) -fabricante de chips para Apple Inc (AAPL) y Nvidia- empiece a producir chips de 2nm unas tres generaciones por delante.

Peor aún, el principal socio de producción de Huawei, Semiconductor Manufacturing International Corp., está luchando para producir incluso chips de 7nm en volúmenes constantes. Las líneas de producción de 7nm de la firma con sede en Shanghái han estado plagadas de problemas de bajo rendimiento y fiabilidad, según otra persona. Hay pocas garantías de que Huawei pueda conseguir suficientes procesadores para smartphones y chips de IA en los próximos años, añadió la persona.

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Los representantes de Huawei y SMIC no respondieron a los mensajes y llamadas en busca de comentarios.

Las luchas de Huawei reflejan cómo años de sanciones estadounidenses han logrado un éxito inicial al congelar los avances tecnológicos chinos en los niveles actuales, y han privado a sus campeones nacionales de la oportunidad de pasar al siguiente nivel.

En los últimos años, Huawei ha asumido un papel fundamental en los esfuerzos de China por lograr la autosuficiencia en áreas críticas como los semiconductores y la IA. Pero el tropiezo de la empresa con sede en Shenzhen -a pesar de la fuerte inversión en I+D y el respaldo de la nación- pone de manifiesto la enorme dificultad a la que se enfrenta Pekín para intentar construir una cadena de suministro de categoría mundial y alcanzar a EE.UU. en tecnologías emergentes.

Uno de los mayores cuellos de botella es la inferior calidad de los equipos chinos. Pekín quiere que los fabricantes de chips locales desplieguen más máquinas de proveedores nacionales, para galvanizar un ecosistema doméstico. Pero la moratoria sobre los EUV -un requisito indispensable para la fabricación moderna de chips- está obstaculizando esa campaña.

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En respuesta, Huawei y sus socios están recurriendo a métodos bastante novedosos para tratar de escalar en la escala tecnológica.

Los fabricantes de chips estatales han estado intentando llevar al límite las antiguas máquinas de litografía ultravioleta profunda de ASML, la segunda mejor línea del proveedor holandés (después de las EUV), con la llamada técnica de patrón cuádruple.

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Eso requiere que las máquinas litográficas realicen hasta cuatro exposiciones en una oblea de silicio, con un margen de error total no superior a centésimas del diámetro de un cabello humano. En comparación con la litografía EUV, la técnica de multipatterning con DUV no solo requiere muchos recursos, sino que también es propensa a errores de alineación y pérdidas de rendimiento, según Ying-Wu Liu, analista de la empresa de investigación Yole Group.

Según una de las personas, ese esfuerzo no está yendo bien debido a los deficientes equipos locales utilizados junto con los sistemas DUV de ASML. En al menos una línea de producción de prueba, los ingenieros se han visto obligados a sustituir los engranajes chinos por equipos extranjeros para garantizar un rendimiento razonable, dijo la persona.

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"El multiestampado introduce intrínsecamente más pasos en el proceso, lo que aumenta el riesgo de defectos y variabilidad", dijo Liu. "Además, la mayor complejidad y el coste del multipatterning lo hacen menos viable económicamente para la producción de gran volumen de nodos avanzados como el de 5 nm".

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La administración Biden ha restringido a China la compra de los equipos más sofisticados de proveedores estadounidenses como Applied Materials Inc. y Lam Research Corp. y de los chips de IA más potentes de Nvidia, una mercancía al rojo vivo codiciada por las grandes empresas tecnológicas y los gobiernos.

Huawei necesita cada año decenas de millones de procesadores de la marca Kirin para sus propios teléfonos inteligentes y aspira a fabricar cientos de miles de chips de IA Ascend, según una persona familiarizada con el negocio de la firma de Shenzhen. Este año, Pekín instó a las empresas chinas a evitar el uso de Nvidia y a adoptar en su lugar alternativas nacionales como las de Huawei, según ha informado Bloomberg News.

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En 2023, presentó el famoso smartphone Mate 60 Pro con un chip de 7nm de diseño propio fabricado por SMIC, justo cuando la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, principal responsable de las sanciones de Biden, estaba de gira por Pekín. Eso cimentó sus credenciales tecnológicas a los ojos del público chino. Las ventas crecieron siete trimestres consecutivos gracias a la fuerte demanda de ese dispositivo.

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Una señal de los problemas de Huawei es su silencio en 2024 sobre el procesador que alimenta sus próximos smartphones insignia, que están apareciendo más tarde de lo que lo hizo el Mate 60 Pro.

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Huawei tiene previsto desvelar su Mate 70 de próxima generación el 26 de noviembre. Pero no anunció ninguna especificación de hardware cuando empezó a aceptar pedidos esta semana. En los últimos meses, Huawei ha pregonado en cambio los progresos de su sistema operativo móvil Harmony.

“Ya sea a través de la mejora del multi-patterning o de la creación de herramientas EUV domésticas, China todavía se enfrenta a importantes retos para lograr una producción de 5nm con rendimientos rentables y un volumen suficiente”, dijo Liu de Yole.

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