Bloomberg — Mercedes-Benz Group AG planea intensificar la reducción de costos después de que la feroz competencia y la menor demanda en China golpearan los beneficios del fabricante de automóviles de lujo.
El indicador clave de rentabilidad de la empresa cayó al 4,7% en el tercer trimestre, por debajo de su objetivo mínimo del 8% y el nivel más bajo desde que el fabricante de automóviles se separó de su negocio de camiones a finales de 2021. El descenso se produce después de que las ventas de los modelos más caros del fabricante de automóviles cayeran durante el periodo, asestando un duro golpe a una estrategia que da prioridad al lujo y que pretendía obtener mayores beneficios.
“Los resultados del tercer trimestre no están a la altura de nuestras ambiciones”, declaró este viernes el director financiero Harald Wilhelm. “Estamos adoptando una visión prudente sobre la evolución del mercado en el futuro e intensificaremos todos los esfuerzos en nuevos aumentos de eficiencia y mejoras de costos en todo el negocio”.
Las acciones de Mercedes cayeron hasta un 3,9% en las primeras operaciones. Las acciones han bajado cerca de un 9% este año.
Los resultados de Mercedes contrastaron fuertemente con los de Tesla Inc (TSLA), que vio cómo sus acciones experimentaban la mayor subida en 11 años después de que la empresa publicara unos beneficios y unos márgenes de beneficio sorprendentemente fuertes. El fabricante estadounidense preveía un aumento de las entregas en el último trimestre, mientras que Mercedes dijo que sus ventas se mantendrían en un nivel similar.
La ralentización económica de China ha golpeado duramente al fabricante de automóviles alemán, especialmente en los pedidos de los modelos de gama alta Clase S y Maybach. Mientras tanto, su vasta huella industrial significa que la empresa se enfrenta a costes estructuralmente más elevados que firmas como Tesla. La recesión en China ya obligó a la empresa a recortar sus perspectivas de ventas para 2024 y a reducir los márgenes de beneficio ajustados de su unidad de automóviles.
Aunque Mercedes prometió mejorar su posición de costos, no dio detalles sobre dónde recaerían los recortes. El fabricante opera varias plantas en Alemania, donde los costos laborales y energéticos son relativamente altos. También está invirtiendo mucho en investigación y desarrollo para su cambio hacia la electrificación, al tiempo que produce tanto modelos eléctricos como con motor de combustión en su extensa red de fábricas.
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La cifra de rentabilidad del fabricante de automóviles es probablemente la más baja desde el segundo trimestre de 2020, cuando las ventas y la producción se vieron afectadas por las interrupciones durante las primeras fases de la pandemia del coronavirus. Mercedes no publicó cifras solo para su margen de fabricación de automóviles hasta su escisión de Daimler Truck, en su lugar proporcionó una cifra combinada para automóviles y furgonetas.
Los resultados suponen un golpe al núcleo de la estrategia de Mercedes para ayudar a financiar su transición hacia un futuro totalmente eléctrico. China, donde el fabricante de automóviles vende una parte relativamente alta de sus vehículos más opulentos, se consideraba un modelo que la empresa quería replicar en otros lugares.
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Los ingresos de Mercedes en el tercer trimestre fueron de 34.500 millones de euros (US$37.400 millones), alrededor de un 7% menos que en el mismo periodo del año anterior. Los beneficios antes de intereses e impuestos cayeron a 2.520 millones de euros, lo que supone un descenso del 48% respecto al mismo periodo del año anterior.
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