Bloomberg — Stellantis NV (STLA) recortó sus previsiones para el año, argumentando planes para reducir la producción y gastar más en incentivos promocionales en un mercado automotor más competitivo y en desaceleración.
El margen de la ganancia operativa ajustada se desplomará hasta el 5,5%-7% este año, frente a la previsión anterior de un porcentaje de dos dígitos, indicó el fabricante de automóviles este lunes en un comunicado.
Lea además: ¿Se estancará la economía de Alemania este 2024? Esto dicen los analistas
Stellantis también prevé ahora que el flujo de caja libre industrial oscilará entre €5.000 millones (US$5.600 millones) negativos y €10.000 millones negativos, frente a las previsiones anteriores de una generación de efectivo positiva. Sus acciones se desplomaron hasta un 14% en Milán, su mayor caída intradiaria desde marzo de 2020.
Aunque Stellantis es el último de una serie de fabricantes de automóviles que han rebajado recientemente sus perspectivas de ganancias —incluida Volkswagen AG, que acaba de emitir su segunda advertencia en tres meses— el CEO, Carlos Tavares, se ha visto últimamente sometido a una presión especialmente intensa. Inversionistas, distribuidores y sindicatos lo han criticado por la caída de las ventas, la anticuada gama de vehículos en EE.UU. y el abultado inventario.
Vea más: Concesionarios critican al CEO de Stellantis por decisiones “dañinas” para las marcas
Bloomberg informó la semana pasada de que el presidente, John Elkann, había iniciado la búsqueda de un sucesor para el CEO, cuyo contrato finaliza a principios de 2026.
Stellantis promete ahora una acción más agresiva para volver a alinear el suministro de vehículos y apunta a no superar las 330.000 unidades de inventario de los concesionarios a finales de año, en lugar del primer trimestre de 2025. El fabricante pretende conseguirlo fabricando 200.000 vehículos menos en el segundo semestre —el doble de la reducción prevista anteriormente— y aumentando el gasto en incentivos.
El anuncio se suma a una letanía de recortes en las previsiones de los fabricantes de automóviles europeos. Volkswagen y Mercedes-Benz Group AG están luchando contra la caída de las ventas en China, BMW AG se ha visto afectado por un costoso retiro de automóviles por un problema de frenos y Volvo Car AB se está viendo afectado por el aumento de los aranceles sobre los vehículos eléctricos.
Lea también: Volkswagen recorta sus previsiones por segunda vez a medida que aumentan los retos
Aston Martin Lagonda Global Holdings Plc se unió este lunes a Stellantis y a los demás en la rebaja de sus perspectivas, citando las interrupciones en la cadena de suministro y la debilidad económica en China. Las acciones del fabricante británico se desplomaron hasta un 28% en Londres.
Stellantis es un caso único entre los fabricantes europeos de automóviles, ya que sus problemas son más graves en Norteamérica. Previamente este mes, los directivos de la red de concesionarios estadounidenses acusaron a Tavares de perjudicar a marcas como Jeep, Dodge, Ram y Chrysler, y le instaron a gastar más dinero para eliminar el inventario de sus lotes.
Lea más en Bloomberg.com
