Bloomberg Línea — El presidente electo Donald Trump está seleccionando a la exrepresentante estadounidense y excandidata presidencial demócrata Tulsi Gabbard para ser su directora de inteligencia nacional, elevando a un leal y escéptico del apoyo a Ucrania para coordinar las agencias de espionaje de la nación.
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“Como excandidata a la nominación presidencial demócrata, tiene un amplio apoyo en ambos partidos, ¡ahora es una orgullosa republicana!” dijo Trump en un comunicado. “Sé que Tulsi traerá el espíritu intrépido que ha definido su ilustre carrera a nuestra Comunidad de Inteligencia”.
Gabbard, que representó a Hawái en la Cámara de Representantes de Estados Unidos como demócrata de 2013 a 2021, es veterana de la guerra de Irak y sigue sirviendo como oficial en la Reserva del Ejército. Se postuló para ser la candidata presidencial del Partido Demócrata en las elecciones de 2020 antes de retirarse de la carrera y respaldar al presidente Joe Biden.
Pero Gabbard se enfrentó con otros demócratas y anunció en 2022 que abandonaba el partido. Como invitada frecuente en Fox News, a menudo criticaba a los miembros de su propio partido, y más tarde se desempeñó como presentadora de reemplazo para el programa de Tucker Carlson antes de que dejara la cadena.
En este ciclo, abrazó a Trump, apareciendo con él en eventos y sirviendo como copresidenta honoraria de su equipo de transición, junto con otro exdemócrata, Robert F. Kennedy Jr. Gabbard anunció en octubre que se uniría al Partido Republicano.
Ha abogado por menos despliegues de tropas estadounidenses en el extranjero y ha criticado a la vicepresidenta Kamala Harris, rival de Trump en las elecciones generales, por buscar el apoyo de los “belicistas” republicanos como el exvicepresidente Dick Cheney y los exrepresentantes Liz Cheney y Adam Kinzinger.
Gabbard se reunió con el presidente sirio Bashar al-Assad en Siria en enero de 2017 y luego expresó su escepticismo de que Assad usara armas químicas contra sus propios ciudadanos, contrariamente a las evaluaciones de inteligencia de Estados Unidos. Criticó a Trump por llevar a cabo ataques con misiles en territorio sirio en abril de 2017, calificándolo de “miope”.
Al igual que Trump y su vicepresidente electo, JD Vance, Gabbard ha expresado su escepticismo sobre la defensa de Ucrania. Escribió una publicación en X en febrero de 2022 en la que afirmaba que la guerra “podría haberse evitado fácilmente si la Administración Biden/OTAN simplemente hubiera reconocido las legítimas preocupaciones de seguridad de Rusia con respecto a la adhesión de Ucrania a la OTAN, lo que significaría que las fuerzas de EE.UU. y la OTAN estarían justo en la frontera de Rusia”.
Las 17 agencias de inteligencia de Estados Unidos reportan a la ODNI, incluidos los centros de poder de alto perfil como la Agencia Central de Inteligencia y la Oficina Federal de Investigaciones.
El rol podría poner a Gabbard en una posición incómoda con Trump. El presidente electo ha tenido una relación hostil con la comunidad de inteligencia, poniéndose del lado del presidente ruso Vladimir Putin sobre la evaluación de sus propias agencias sobre la intromisión de Moscú en las elecciones de 2016 y acusando al “estado profundo” de estar “armado” contra él, sus aliados y partidarios.
Trump también ha sido criticado por su manejo de los secretos mejor guardados de Estados Unidos, incluido el intercambio de inteligencia confidencial de Israel con funcionarios rusos al principio de su mandato en la Casa Blanca. Más tarde fue acusado por presuntamente guardar documentos altamente clasificados en su resort Mar-a-Lago después de que terminó su primer mandato.
La posición de la ODNI se politizó en el transcurso de su primer mandato. John Ratcliffe, quien no tenía experiencia significativa en inteligencia cuando reemplazó a Dan Coats, fue criticado por publicar desinformación rusa clasificada relacionada con Hilary Clinton y la campaña de 2016.
Trump ha dicho que nominará a Ratcliffe como jefe de la CIA.
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