Bloomberg — El presidente Donald Trump eligió a la gobernadora de la Reserva Federal, Michelle Bowman, para ocupar el cargo de vicepresidenta de supervisión del banco central, una medida aplaudida por los bancos de Wall Street y los prestamistas más pequeños que esperan que sea más amistosa con el sector.
“Miki ha estado sirviendo honorablemente en la Junta de Gobernadores de la Fed desde 2018, y tiene una gran experiencia en el tratamiento de la inflación, la regulación y la banca”, dijo Trump en un post en las redes sociales el lunes.
Bloomberg informó previamente que se esperaba que Trump nominara pronto a Bowman para el cargo.
“De ser confirmada, promoveré un sistema bancario seguro y sólido a través de un enfoque pragmático de la supervisión y la regulación con un marco regulador bancario transparente y adaptado que fomente la innovación”, dijo Bowman en un comunicado.
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Se espera que Bowman apoye un toque más ligero en la regulación bancaria que su predecesor, Michael Barr. Ella ha sido una dura crítica de un plan histórico para exigir a los bancos que posean más capital que se dio a conocer en 2023.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo a principios de este año que es optimista de que se pueda llegar a un acuerdo sobre el tan esperado plan “con bastante rapidez”.
El presidente del Comité Bancario del Senado, Tim Scott, aplaudió el nombramiento y calificó a Bowman de voz importante para “hacer retroceder las normas onerosas”.
Por el contrario, la senadora Elizabeth Warren de Massachusetts dijo que tenía “profundas preocupaciones” de que poner a Bowman a cargo de la supervisión del banco central “ruega por otro ciclo de desregulación de Wall Street, quiebras bancarias y rescates”.
Bowman, banquera de quinta generación, ocupó anteriormente el cargo de comisionada bancaria del estado de Kansas y fue vicepresidenta del Farmers & Drovers Bank. Se convirtió en miembro del consejo de la Fed en 2018 y preside el Subcomité de Banca Regional y Comunitaria más Pequeña del banco central.
En su papel como máxima responsable de la supervisión bancaria de la Fed, tendría que sortear una orden ejecutiva de Trump que recorta el poder de las agencias independientes. La orden, emitida en febrero, requiere que la Fed presente proyectos de reglamentos relacionados con la supervisión para su revisión por la Casa Blanca y consulte con la administración sobre prioridades y planes. Eximía la labor del banco central en materia de política monetaria.
Algunos ejecutivos de grandes bancos están ansiosos por ver a Bowman confirmado.
“El sector estaría entusiasmado con el nombramiento de Miki Bowman, y entonces eso puede ayudar a los bancos a avanzar, a hacer lo que el banco debería estar haciendo, que es introducir capital en el sistema y ayudar a apoyar el crecimiento de la economía”, dijo el CEO de Goldman Sachs Group Inc. (GS) David Solomon en una entrevista con Fox Business la semana pasada.
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Aaron Klein, de la Brookings Institution, dijo que la elección de Trump es una “persona con experiencia” que ayuda a la Fed con la continuidad.
La medida ocupa el puesto que dejó vacante Barr, quien renunció a ese cargo a principios de este año y evitó una posible pelea con Trump por el puesto. Sigue siendo miembro de la Junta de Gobernadores de la Fed.
“Es un cambio importante respecto a Barr, pero no creo que sea una persona atípica respecto a los republicanos tradicionales que hemos visto en la Fed”, dijo Ian Katz, director gerente de Capital Alpha Partners en Washington.
Con la colaboración de Craig Torres y Steven T. Dennis.
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