¿Qué puede pasar con las tasas de los bonos de EE.UU. tras el triunfo de Trump? Esto prevé Bofa

En 2024, la tasa del bono del Tesoro a 10 años se movió dentro de un rango relativamente ajustado, entre 3,6% y 4,7%

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Previo al triunfo de Donald Trump en Estados Unidos, decenas de informes de research anticipaban que los rendimientos del Tesoro de los Estados Unidos podrían subir fuertemente con la llegada al poder del líder republicano. Por el momento, las tasas se encuentran por encima de los valores que se observaban antes del 5 de noviembre, pero aún sin grandes estridencias.

Respecto de esta situación, Bank Of America (BofA) publicó un informe analizando qué puede suceder con los Treasuries en el mediano plazo, en un Estados Unidos que será gobernado, nuevamente, por Donald Trump, desde el 20 de enero de 2025.

La mirada de BofA respecto de la renta fija estadounidense

Las tasas de largo plazo de Estados Unidos se han mantenido en un rango estable durante el último año, a pesar de los cambios en las condiciones económicas y políticas. En 2024, la tasa del bono del Tesoro a 10 años se movió dentro de un rango relativamente ajustado, entre 3,6% y 4,7%, alineándose con las estimaciones de valor justo de BofA.

“Para 2025, anticipamos una dinámica similar y hemos ajustado nuestra previsión para el bono a 10 años a 4,25%”, sostiene el documento del banco estadounidense.

Según los analistas, esta proyección está basada en la fortaleza macroeconómica de Estados Unidos prevista por el equipo de economía de la entidad, pero, al mismo tiempo, pondera ligeramente los riesgos, debido a la incertidumbre en la política.

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Esperamos que las tasas del bono a 10 años oscilen entre 4% y 4,5% en los próximos meses, sugiriendo aprovechar las fluctuaciones en los extremos de este rango”, detallaron desde BofA.

Las perspectivas y recomendaciones clave del equipo de research de Bank Of America son las siguientes:

  • Duración:Tenemos una postura moderadamente positiva respecto a la duration (preferencia por bonos a más largo plazo), considerando nuestras proyecciones de tasas en comparación con las tasas implícitas en los contratos a futuro. Recomendamos a los clientes operar con tasas de manera táctica y respetando los rangos recientes. Tendríamos más confianza en aumentar la exposición a duración si las tasas del bono a 10 años están por encima o cerca del 4,5% y si hubiera señales más claras de posiciones cortas en el mercado. Seguimos prefiriendo agregar duración en la parte media de la curva (que se beneficia de menores recortes de tasas por parte de la Reserva Federal) y mantenemos una postura de menor peso en la parte larga de la curva, debido a los riesgos asociados con la oferta y la demanda de bonos del Tesoro”.
  • Curva: “Sesgo hacia un lento empinamiento en la curva de bonos del Tesoro de EE.UU. (UST) en tasas nominales de 5 a 30 años. El empinamiento de la curva nominal se debe a los riesgos de recortes más profundos por parte de la Reserva Federal en comparación con el punto más bajo actual y a preocupaciones sobre la oferta y demanda en el extremo largo de la curva”.
  • Mercado de spreads: “Recomendamos posiciones cortas debido a los riesgos asociados con la oferta y la demanda de bonos”.
  • Bonos atados a inflación: “Preferimos bonos ligados a la inflación en el tramo entre 1 y 4 años, dado que esperamos que el riesgo de una caída en los precios del petróleo a corto plazo sea contrarrestado por el impacto de mediano plazo de los aranceles, la inmigración y las políticas fiscales”.
  • Volatilidad: “Prevemos que la volatilidad se mantendrá elevada en 2025 debido a un amplio rango de posibles escenarios, la incertidumbre y la reacción de la Reserva Federal. Existe la posibilidad de que la volatilidad a 1 año en bonos a 10 años caiga por debajo de los 100 puntos básicos, si disminuye la incertidumbre y la Reserva Federal adopta una postura más flexible”.