Bloomberg Línea — El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca representará un cambio significativo en las relaciones entre Estados Unidos y Latinoamérica, en especial en materia comercial y arancelaria, en asuntos migratorios e incluso en la política antidrogas.
En su segundo mandato, Donald Trump probablemente no priorizará la política exterior al inicio de su Presidencia, y particularmente con América Latina el enfoque más relevante será la migración, especialmente en relación con México y los países centroamericanos, anticipó en diálogo con Bloomberg Línea el analista político y académico Germán Prieto.
Explica que, en términos económicos, no se prevén conflictos relevantes con México, dado que el antiguo NAFTA ya fue renegociado y convertido en el T-MEC. “No creo que el tema comercial con México vaya a ser álgido”.
En cuanto a Sudamérica, dice que es poco probable que se adopten medidas específicas, más allá de mantener una retórica crítica hacia los Gobiernos de izquierda y enfatizar en la lucha contra el narcotráfico.
Bloomberg Línea comparte algunos de los principales planes de Donald Trump para Latinoamérica tras su posesión en EE.UU.
El plan arancelario de Donald Trump
Una de las interrogantes sobre el plan de Trump con relación a Latinoamérica es cómo se materializará su anuncio de incrementar los aranceles y su interés en renegociar varios tratados de libre comercio, al mismo tiempo que hay incertidumbre sobre cómo abordará el arbitraje de inversión en este contexto, dijo a Bloomberg Línea el analista Enrique Prieto-Ríos.
El plan de Trump implica imponer aranceles del 60% a las importaciones de China, así como un 25% a las de Canadá y México para presionar medidas que pongan freno a la migración irregular y al tráfico de drogas, en medio de la crisis que enfrenta el país por el fentanilo.
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Según un informe de la agencia Moody’s, Latinoamérica absorbería el choque real y financiero de las políticas arancelarias de Donald Trump a través de un menor crecimiento económico y una alta inflación en los países afectados, aunque Argentina y Colombia podrían ayudar a nivelar los impactos.
“El impacto directo en el crecimiento de la región provendrá de México y Brasil, que enfrentarán aranceles a sus exportaciones. Sin embargo, el efecto estadístico de un mayor crecimiento en Argentina y Colombia ayudará a amortiguar el impacto adverso de los aranceles en el crecimiento promedio de la región”, dice en el reporte de Perspectivas Económicas de América Latina en 2025.
Donald Trump arremeterá contra la migración irregular
Uno de los planes que más tendrían impacto en Latinoamérica es el referente al de la deportación masiva que plantea ejecutar el líder republicano. “Vamos a parar la invasión en nuestras fronteras”, dijo Donald Trump en un discurso ante simpatizantes este domingo.
El fin de semana The Wall Street Journal reportó que Donald Trump planea declarar emergencia nacional en la frontera con México. También se espera que Donald Trump solicite a las tropas que ayuden a construir más infraestructura en la frontera.
Trump ordenará reactivar la política de “Permanecer en México”, designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras y restringir la entrada a los Estados Unidos, probablemente a través de una prohibición de viajes.
Los primeros efectos de las políticas de Trump sobre la migración podrían sentirse en las remesas, de las cuales dependen en gran medida países de Centroamérica y también México.
“Entre los mercados emergentes más grandes, México podría ver caer las remesas en un 0,6% del PIB si la próxima Administración estadounidense asegura efectivamente su frontera, o en un 3,4% del PIB si deporta a todos los inmigrantes no autorizados”, indica un reporte de Bloomberg Intelligence.
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Trump buscará acercarse más a sus aliados en Latam y condicionar su apoyo
Con la llegada al poder de Donald Trump y una posición más hostil contra China, analistas de Bloomberg Intelligence prevén que se podrían generar presiones hacia los mercados emergentes para que tomen partido contra el gigante asiático, “en parte condicionando la ayuda o el apoyo de EE.UU., incluso en instituciones multilaterales”.
En plano internacional, “los líderes de los mercados emergentes que expresen su apoyo a Trump personalmente podrían comprar algo de buena voluntad. La alineación ideológica y diplomática también ayuda, lo que podría beneficiar al turco Recep Tayyip Erdogan y al argentino Javier Milei. Para Argentina, esto podría significar una ayuda para acelerar un nuevo acuerdo con el FMI”, según el análisis de Adriana Dupita.
Presiones de Donald Trump hacia Panamá por el Canal
Trump dijo en diciembre que el Canal de Panamá está cobrando “precios y tarifas de paso exorbitantes” y amenazó con retomar el control estadounidense sobre esa vía marítima si estas no se reducen.
“Las tarifas que está cobrando Panamá son ridículas, especialmente conociendo la extraordinaria generosidad que EE.UU. ha otorgado a Panamá”, dijo Trump en un post en su plataforma Truth Social.
Trump también sugirió que el canal corría peligro de caer en las manos equivocadas, diciendo que no le corresponde a China gestionarlo, informó Bloomberg
Asimismo, el mandatario electo ha dicho que cuando tome posesión el próximo 20 de enero quiere renombrar el golfo de México como “Golfo de América”.
“Vamos a cambiar el nombre del golfo de México por el ‘Golfo de América’, que suena muy bien y abarca una gran extensión de territorio. Qué nombre tan hermoso. Y es apropiado, realmente lo es”, manifestó Trump el martes 7 de enero durante una rueda de prensa.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, le respondió a Trump que el nombre de este territorio es reconocido por las Naciones Unidas, pero además evidenció que se le identifica así desde 1607. Sheinbaum argumentó que, cuatro siglos atrás, a la región de Norteamérica se le conocía como “América Mexicana”.
“¿Por qué no le llamamos América Mexicana? Se oye bonito, ¿no? ¿Verdad que sí? Desde 1607. Vamos a llamarle América Mexicana”, agregó haciendo referencia a una parte del territorio estadounidense actual.
Donald Trump chocará con el Gobierno de Venezuela, pero sus acciones se materializarían más en lo económico
En el caso de Venezuela, Germán Prieto manifestó que es previsible que Trump asuma una postura desafiante y discursivamente hostil hacia el Gobierno de Nicolás Maduro, aunque sin implementar acciones concretas: “No veo a Trump llevando a cabo ningún tipo de acción física o material contra Venezuela”, dijo el también profesor de Ciencia Política y Relaciones Internacional de la Universidad Javeriana en Colombia.
En todo caso, se espera que las presiones contra la Administración de Maduro se reflejen más bien en lo económico a través de nuevas sanciones.
El pasado 10 de enero, cuando Maduro juró su cargo para otro mandato de seis años en Venezuela, la Administración de Joe Biden anunció sanciones contra el jefe de la petrolera estatal PDVSA.
Además, incrementó la recompensa por información que conduzca al arresto del presidente venezolano, así como del ministro de Justicia de ese país, Diosdado Cabello, por cargos de narcotráfico a US$25 millones.
Asimismo, se emitió una nueva recompensa de US$15 millones por el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López.
La política antidroga y presiones a países como Colombia
De otra parte, con la llegada al poder de Donald Trump se esperan mayores presiones para que los países de la región tomen medidas más efectivas contra la producción de droga. “El tema de la política de drogas volverá a ser central, tendremos algunas diferencias, pero es importante encontrar un lugar común”, anticipó en noviembre el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo.
Colombia alcanzó las 253.000 hectáreas (ha) sembradas con coca en 2023, lo que supuso un aumento del 10% con respecto al 2022, mientras que la producción de clorhidrato de cocaína pura llegó a 2.664 toneladas métricas (tm), lo que significó una importante subida del 53%, de acuerdo a un informe de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) divulgado en octubre.
La expansión de los cultivos de coca en el país andino facilita la diversificación de la oferta criminal, mientras la incidencia del crimen transnacional en el mercado de la cocaína se mantiene, “generando cambios estructurales en las relaciones de poder, lo que conduce a una alta disponibilidad de financiación y especialización productiva en áreas estratégicas”, según el Monitoreo de territorios con presencia de cultivos de coca en 2023.
Enrique Prieto-Ríos, profesor de Derecho Internacional Universidad del Rosario, dijo que en Colombia existe una gran expectativa sobre cómo será la relación entre el Gobierno de Gustavo Petro y el de Trump, así como el papel del senador Marco Rubio, nominado como secretario de Estado de Estados Unidos en la nueva Administración, en esta dinámica.
Explicó que aunque ambos Gobiernos están en orillas ideológicas opuestas, será necesario mantener una relación pragmática. Esto se debe tanto a los intereses de Trump en cumplir sus promesas de campaña, como a las prioridades de Colombia, que incluyen la lucha contra las drogas y la obtención de apoyos en tecnología militar y económicos.
La cooperación en estos temas será crucial para ambos países, anticipó el analista.
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