Bloomberg — La prohibición estadounidense de TikTok de ByteDance Ltd. está a punto de retrasarse debido a que la fecha límite para la venta de la aplicación cae en un fin de semana festivo y la administración entrante del presidente electo Donald Trump prometió una extensión.
La administración del presidente Joe Biden no planea intervenir antes de la fecha límite del 19 de enero para que la rama estadounidense de TikTok encuentre un comprador para la aplicación para compartir videos de propiedad china o será cerrada, dijeron dos funcionarios familiarizados con la planificación, que hablaron bajo condición de anonimato para detallar el enfoque del gobierno.
Los funcionarios dijeron que la fecha límite, que vence el domingo, un día antes del feriado federal de Martin Luther King Jr. y la toma de posesión de Trump, esencialmente deja la cuestión de cómo lidiar con la aplicación en manos de sus sucesores en la Casa Blanca.
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Un funcionario dijo que la política de la administración actual ha sido clara: que TikTok debería seguir funcionando, pero bajo propiedad estadounidense, y que el momento de la fecha límite dejaba la implementación de la prohibición en manos de la próxima administración.
La ley permite una prórroga de 90 días en caso de que exista un plan creíble de desinversión. La administración de Biden no ha recibido un plan de ese tipo y no cree que tenga autoridad para retrasar su implementación, dijo un funcionario.
Uno de los funcionarios dijo que los usuarios de TikTok no deberían esperar un cierre inmediato el domingo.
Michael Waltz, el nuevo asesor de seguridad nacional de Trump, ya ha dicho que la próxima administración tiene la intención de encontrar una manera de extender el plazo.
“Implementaremos medidas para evitar que TikTok deje de funcionar”, dijo Waltz a Fox and Friends de Fox News el jueves por la mañana, y agregó que la ley sobre la prohibición inminente “permite una extensión siempre que haya un acuerdo viable sobre la mesa”.
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“Eso le da tiempo al presidente Trump para mantener TikTok en funcionamiento”, dijo Waltz, quien votó a favor de la prohibición el año pasado mientras servía en la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
A pocos días de que se prohíba TikTok, debido a las preocupaciones de que la aplicación sea un riesgo para la seguridad de los datos y una herramienta de propaganda del Estado chino, los políticos de los dos principales partidos de Estados Unidos han estado buscando formas de mantenerla accesible para los usuarios estadounidenses. Trump, que intentó prohibir TikTok durante su primer mandato, ha adoptado desde entonces la aplicación y le atribuye el mérito de haberlo ayudado a reforzar su acercamiento a los votantes jóvenes.
“Ha sido una gran plataforma para él y su campaña para difundir su mensaje de “Estados Unidos primero”, pero al mismo tiempo quiere proteger sus datos”, dijo Waltz el jueves. “Los conservadores no quieren que el FBI, y ciertamente no quieren que los comunistas chinos obtengan sus contraseñas, sus datos y puedan influir excesivamente en el pueblo estadounidense”.
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Ofertas potenciales
Shou Chew, CEO de TikTok, planea asistir a la toma de posesión de Trump, según una persona familiarizada con sus planes que habló bajo condición de anonimato para discutirlos.
En el Capitolio se están haciendo esfuerzos para posponer la fecha límite. Un grupo de legisladores demócratas, entre ellos los senadores Edward Markey de Massachusetts, Ron Wyden de Oregon y Cory Booker de Nueva Jersey, presentaron esta semana una legislación que daría a la empresa otros 270 días para llegar a un acuerdo.
Aunque ByteDance se ha negado a vender, a principios de esta semana personas familiarizadas con el asunto dijeron que los funcionarios chinos estaban evaluando una posible opción que implica que Elon Musk adquiera las operaciones estadounidenses de TikTok si la empresa no logra eludir la prohibición. Musk es un aliado destacado de Trump y tiene un papel en la administración entrante.
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Musk y sus representantes no respondieron a una solicitud de comentarios. Un representante de ByteDance dijo que “no se puede esperar que la compañía haga comentarios sobre pura ficción”.
Los multimillonarios Frank McCourt y Kevin O’Leary también podrían ser compradores atractivos porque no están interesados en adquirir el codiciado algoritmo de TikTok, que ByteDance y Beijing han enfatizado que no está a la venta.
O’Leary se reunió recientemente con Trump en Mar-a-Lago para discutir su propuesta denominada “Proyecto Libertad”, y McCourt y su equipo han hablado con más de 60 funcionarios electos y formuladores de políticas sobre sus planes para lo que McCourt ha descrito como “TikTok 2.0″.
Oracle Corp. y Amazon.com Inc., empresas con las que TikTok ya hace negocios, también han sido mencionadas como posibles contendientes.
Desafío legal
TikTok está impugnando la inminente prohibición ante la Corte Suprema de Estados Unidos, aunque los jueces indicaron durante los argumentos de la semana pasada que están inclinados a confirmar la ley de desinversión o prohibición.
Incluso si se mantiene la ley, TikTok no desaparecerá de los teléfonos de los estadounidenses el domingo. Los estadounidenses ya no podrán descargar TikTok de las tiendas de aplicaciones de Google de Apple Inc. y Alphabet Inc., y los que ya tengan la aplicación instalada ya no podrán actualizarla, pero la plataforma seguirá siendo utilizable al menos temporalmente.
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También está abierta la pregunta de si Trump, una vez en el cargo, podría ordenar al Departamento de Justicia que no aplique la ley, y cómo responderían las empresas tecnológicas estadounidenses encargadas de cumplirla (como Apple, Google y Oracle, que deben dejar de alojar o distribuir la aplicación TikTok en Estados Unidos).
Las empresas que violen la ley podrían estar sujetas a severas sanciones determinadas al “multiplicar 5.000 dólares por el número de usuarios”, según la ley, y en un país donde más de la mitad de la población está en TikTok, esas multas podrían ascender fácilmente a miles de millones.
TikTok podría estar preparando planes separados para simplemente cerrar la aplicación el domingo, según un informe de The Information, una medida destinada a movilizar a muchos de sus 170 millones de usuarios estadounidenses para presionar a la nueva administración a tomar medidas para salvar la aplicación. TikTok no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre si ha presentado un plan de desinversión a la administración Biden.
Los creadores de contenido ya se están organizando en línea para presionar a Trump para que cumpla sus promesas de campaña de mantener viva la aplicación.
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