Empresarios británicos esperan que nuevo gobierno en EE.UU. facilite acuerdo de libre comercio

Entre las empresas de Reino Unido hay incertidumbre sobre las políticas que adelantarían ambos candidatos, en especial las restrictivas con el comercio y las que involucran más aranceles. ¿Cómo se preparan los ejecutivos británicos?

Banderas de la Unión Británica frente a las Casas del Parlamento en Londres, Reino Unido.
05 de noviembre, 2024 | 06:33 AM

Bloomberg Línea — Los empresarios de Reino Unido han asegurado que los resultados de las elecciones en Estados Unidos tendrán impactos relevantes en el comercio, la política económica y los marcos regulatorios actuales, según explicó Tania Hoyos, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Británica y Colombiana en Londres, a Bloomberg Línea.

La relación comercial entre ambos países abarca negocios de miles de millones de dólares y ha atravesado diferentes transformaciones a lo largo de los años, siendo la más representativa la ratificación del Brexit en enero de 2020. Y aunque desde este mismo año se iniciaron negociaciones comerciales, Hoyos asegura que para los empresarios británicos “asegurar un acuerdo de libre comercio sigue siendo una prioridad”.

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La cifras ratifican que EE.UU. es el principal socio comercial de Reino Unido. Desde julio de 2023 y hasta julio de 2024, el comercio total de bienes y servicios (exportaciones más importaciones) entre las dos naciones ascendió hasta los US$393.000 millones. Las exportaciones totales del Reino Unido a Estados Unidos llegaron a los US$243.000 millones en este período, según un informe del Departamento de Negocios y Comercio del país, publicado el 1° de noviembre de 2024.

Para Hoyos, la posibilidad de lograr dicho TLC dependerá de los resultados. Una victoria del expresidente republicano Donald Trump “podría favorecer acuerdos bilaterales” pero proteccionistas con su país, mientras que una victoria de la demócrata Kamala Harris centraría la atención en temas internos, “con menos énfasis en acuerdos comerciales, creando un entorno comercial más predecible pero de avance más lento”.

Lo que esperan los empresarios británicos de las elecciones en EE.UU.

Tres cuartas partes de los británicos han reconocido que les resulta importante quién gane las elecciones en EE.UU. El 64% de los encuestados desean que la actual vicepresidenta sea la próxima presidenta de los Estados Unidos, en comparación con solo uno de cada seis (18%) que esperan un segundo mandato de Trump, de acuerdo con cifras del gobierno de Reino Unido y compartidas por la Cámara de Comercio Británico Colombiana.

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En cuanto a las políticas que impulsaría cada candidato, Tania Hoyos señaló que hay mucha “incertidumbre”, en especial sobre aquellas que representan más aranceles, como los que Trump ha prometido para todas las importaciones.

Los aranceles implican incertidumbre con temas de guerras comerciales, restricciones de bienes y servicios, impactos en las cadenas de suministro. Se impacta el poder adquisitivo de las personas”, dijo en la entrevista.

Kamala Harris y Donald Trump. Foto: Al Drago/Bloomberg and Bill Pugliano/Getty Images.

Y aseguró que los empresarios británicos ya están haciendo sus planes de contingencia para ambos escenarios, en especial en sectores como el farmacéutico y el automotor, que son importantes para la economía británica.

Cifras divulgadas por HSBC mostraron que las empresas del Reino Unido que compran negocios estadounidenses o crean nuevas filiales aumentaron en un 45% durante la primera mitad de 2024. Y es justo por este tipo de tendencias que Hoyos aseguró que los británicos esperan “continuidad”.

Los impactos en los negocios de Reino Unido y Latinoamérica

La directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Británica y Colombiana en Londres indicó a Bloomberg Línea que tras consultar a diferentes empresarios, estos confirmaron que están adelantando proyectos de diversificación y nuevos posibles proveedores o mercados para los productos que se producen en Reino Unido.

“Aranceles más altos siempre van a generar impulsos a mercados alternativos y a remodelar estrategias globales. Ya lo están haciendo. La prioridad para las empresas, independientemente de quién gane las elecciones, es tratar de evitar problemas comerciales y predecir en materia económica qué países pueden generar crecimiento a largo plazo” para los negocios británicos, añadió.

Y precisó que si el resultado favorece los acuerdos de libre comercio, se podrían abrir las puertas para una mayor cooperación en sectores como la tecnología, la agricultura y la energía verde entre estas regiones.

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En cuanto a las empresas británicas que operan en América Latina, Hoyos explicó que cualquier cambio en la política estadounidense podría afectar las cadenas de suministro y la competitividad. Una administración pro-comercio podría fomentar acuerdos comerciales que incorporen estándares modernos en lo digital y compromisos ambientales, “mientras que un enfoque proteccionista podría resultar en aranceles y barreras, desacelerando la inversión en mercados emergentes como Colombia”.

Por último, dijo que una continuidad del partido demócrata en la Casa blanca, en cabeza de Kamala Harris, necesitaría más interés en las agendas y acuerdos multilaterales, lo que no fue una prioridad para el presidente Joe Biden. Así como una participación más activa en políticas de transición energética y políticas para compartir información de tecnologías como la inteligencia artificial (IA).

“Harris podría además expandir el apoyo a pequeñas y medianas empresas (Pymes) en el comercio bilateral, fomentando una mayor equidad en el mercado a medida que crece la economía verde. Políticas más claras sobre inteligencia artificial, privacidad de datos y estándares laborales también podrían fortalecer el comercio con mercados de América Latina y el Reino Unido”, finalizó Hoyos.