Bloomberg — Una medida de los precios pagados a los productores estadounidenses se mantuvo sin cambios en septiembre, limitada por las caídas en la gasolina, lo que sugiere un mayor progreso hacia una inflación más controlada.
El índice de precios al productor para la demanda final se mantuvo sin cambios en agosto después de haber aumentado un 0,2% en el mes anterior, según un informe de la Oficina de Estadísticas Laborales publicado el viernes. En comparación con el año anterior, aumentó un 1,8%, el menor avance desde febrero.
Lea más: La inflación de Estados Unidos sube más de lo previsto en septiembre
Una medida menos volátil favorecida por muchos economistas para eliminar los alimentos, la energía y el comercio subió un 0,1%, igualando el avance más pequeño desde que no hubo cambios en mayo de 2023.
Los datos de inflación mayorista siguen al índice de precios al consumidor, observado más de cerca, que mostró el jueves que la inflación aumentó un poco más de lo previsto en septiembre, debido a los mayores costos de la vivienda, los alimentos y la vestimenta.
Los funcionarios de la Reserva Federal tendrán en cuenta ambos informes a la hora de trazar su camino para reducir las tasas de interés. Los economistas analizan los datos del IPP en busca de categorías que alimentan la medida de inflación preferida por la Fed: el índice de precios de los gastos de consumo personal. Esas categorías fueron mixtas.
Lea más: Brecha comercial de bienes y servicios de EE.UU. se reduce al nivel más bajo en cinco meses
Los costos de la atención médica y de la atención ambulatoria en hospitales se mantuvieron prácticamente sin cambios, mientras que las tarifas aéreas repuntaron marcadamente. Una medida de las comisiones de gestión de cartera se aceleró ligeramente. Los datos de precios del PCE de septiembre se publicarán a finales de este mes.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro se mantuvieron altos y los futuros de los índices bursátiles fluctuaron después de las cifras mayoristas. Los operadores siguen esperando que la Fed reduzca las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual el próximo mes.
La Fed inició su campaña de flexibilización el mes pasado con una reducción de 50 puntos básicos tras meses de inflación más fría y un período de moderación del crecimiento de las nóminas. Desde entonces, los informes han señalado mayores ganancias de empleo y persistentes presiones sobre los precios, lo que llevó a los economistas a reducir las expectativas de una reducción de las tasas en noviembre a un cuarto de punto.
El informe del IPP mostró que los costos de los servicios aumentaron un 0,2%, una desaceleración con respecto al aumento del 0,4% del mes anterior. Los precios de los bienes aumentaron un 0,2% por tercer mes consecutivo, excluyendo los alimentos y la energía.
Lea más: Datos de empleo en EE.UU. son buen augurio para las acciones: estrategas de Wall Street
Los precios mayoristas de los alimentos aumentaron un 1%, el mayor aumento desde febrero, mientras que los precios de la energía cayeron un 2,7%.
Los costos de los bienes procesados para demanda intermedia, que reflejan los precios en etapas anteriores del proceso de producción, cayeron un 0,8% debido a una pronunciada caída del combustible diésel.
Tras caer a un mínimo de tres años a principios del mes pasado, los precios de las materias primas han repuntado con fuerza. Los precios del petróleo han subido debido a las preocupaciones geopolíticas en Medio Oriente, mientras que el entusiasmo por el giro pro-crecimiento de China ha contribuido a impulsar un repunte de los precios de los metales.
Lea más en Bloomberg.com
