Bloomberg — El presidente del Banco de la Reserva Federal de Atlanta, Raphael Bostic, dijo que espera que la economía estadounidense se ralentice este año, pero que se mantenga robusta y añadió que la senda descendente de la inflación podría sufrir algunos baches.
Bostic dijo que proyecta un crecimiento del PIB de alrededor del 2% en 2025 a medida que los hogares gasten sus ahorros. Este año, el crecimiento va rumbo a situarse en torno al 2,6%.
Lea más: Neel Kashkari, de la Fed, prevé recortes “modestos” de tasas en los próximos trimestres
El jefe de la Fed de Atlanta añadió que espera que la tasa de referencia de la Fed descienda a largo plazo hasta alrededor del 3% al 3,5%, pero que el momento en que se alcanzará ese nivel es incierto. Actualmente se encuentra en un rango del 4,75% al 5%.
“La pregunta que todo el mundo nos hace es ‘¿con qué rapidez? Creo que depende de lo que ocurra en el mercado laboral y de lo que pase con la inflación”, dijo Bostic el martes durante una conversación moderada en Atlanta. “En realidad, creo que vamos a ver una inflación inestable y espero que veamos que el empleo se mantiene robusto”.
Los banqueros de la Fed redujeron los costos de los préstamos en medio punto porcentual el mes pasado, un movimiento mayor de lo habitual destinado a proteger la fortaleza de la economía.
Lea más: John Williams de la Fed dice que las tasas de interés deberían volver a “un nivel más neutral”
Un sólido informe sobre el empleo y una lectura de la inflación en septiembre más fuerte de lo esperado han llevado a varios responsables políticos a afirmar que el banco central estadounidense debería avanzar a un ritmo más gradual con los futuros recortes de las tasas.
Bostic dijo la semana pasada que estaba abierto a dejar las tasas sin cambios en una de las dos reuniones que le quedan a la Fed este año si los datos apoyan ese enfoque. Repitió el martes que había descontado un recorte más de las tasas de un cuarto de punto para este año en la reunión del mes pasado, pero que la senda final para las tasas dependería de la economía.
Lea más en Bloomberg.com
