Bloomberg — El Senado aprobó el viernes un plan de gastos republicano, evitando un cierre del Gobierno estadounidense horas antes de que venciera el plazo a medianoche y exacerbando al mismo tiempo una furiosa lucha en el seno del partido demócrata sobre cómo enfrentarse a Donald Trump.
El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, y un grupo de otros demócratas ayudaron a la mayoría republicana a superar un obstáculo de procedimiento crucial y allanar el camino para la aprobación de los fondos.
Sus acciones desperdiciaron lo que algunos consideraban la mejor herramienta del partido para imponer restricciones a los despidos masivos de empleados federales y la eliminación total de agencias federales de Trump y Elon Musk. Los opositores tendrán que recurrir a los tribunales.
Schumer, un veterano de 45 años en el Capitolio, tomó la decisión crucial el jueves por la noche, a menos de 30 horas de la fecha límite del cierre, anunciando que abandonaría un bloqueo del proyecto de ley de gastos en lugar de arriesgarse a ser culpado por una interrupción de los servicios gubernamentales al público estadounidense.
La retirada de Schumer y la aprobación del paquete de financiación es una victoria política para Trump y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, que lucharon para garantizar que la medida no pusiera trabas a la cruzada de recorte de gastos del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Musk y mantuviera la financiación del Gobierno hasta el 30 de septiembre, fecha en que finaliza el año fiscal federal.
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La disputa que libraron demócratas y republicanos sobre un posible cierre se desarrolló mientras los mercados financieros estaban agitados por la campaña arancelaria de Trump e hipersensibles a nuevas perturbaciones. El jueves, el índice de referencia S&P 500 había caído más de un -10% en una derrota de tres semanas, alcanzando el umbral para una corrección. El índice repuntó el viernes, subiendo más de un 2%.
Nueve demócratas y un independiente aliados se unieron a casi todos los republicanos en la votación clave de procedimiento, superando un umbral de 60 votos y allanando el camino para la aprobación.
Poco después, el Senado aprobó la medida por 54 contra 46. La senadora demócrata Jeanne Shaheen, de Nuevo Hampshire, y Angus King, independiente de Maine, se unieron a los republicanos en la votación a favor de la ley.
Los demócratas del Senado discutieron durante días entre ellos sobre cómo proceder con la financiación. El debate a puerta cerrada reflejó una lucha dentro del partido sobre cómo desafiar a Trump tras perder el control de todos los poderes electos del gobierno en noviembre.
El núcleo de votantes progresistas dedicados del partido está clamando por enfrentarse al desmantelamiento de partes del gobierno federal por parte de Musk. Muchos moderados preferirían esperar para librar la batalla sobre la protección de Medicaid y otras prestaciones ampliamente populares y sobre los trastornos económicos que prevén por el agresivo uso de aranceles por parte de Trump.
La decisión de Schumer de abandonar el bloqueo procedimental provocó furiosas críticas de los demócratas.
Eso incluyó a la expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, que surgió como punto focal de la resistencia a Trump en su primer mandato y conserva tanta influencia en el partido que fue decisiva para forzar al presidente Joe Biden a abandonar su campaña de reelección.
“Esta falsa elección que algunos están comprando en lugar de luchar es inaceptable”, dijo en un comunicado en el que denunciaba la medida sin nombrar a Schumer.
“Por favor, tengan agallas. Y rápido”, dijo Susan Rice, asesora principal de política nacional de Biden, en una publicación en redes sociales, atacando duramente a Schumer. “¿Por qué los demócratas deberían hacerse los indiferentes?”.
Los demócratas de la Cámara de Representantes dejaron claro que estaban totalmente en contra del plan del Partido Republicano de la Cámara y animaron a sus moderados de los distritos indecisos a votar en contra el martes. Respaldaron un plan de financiación provisional alternativo de cuatro semanas, argumentando que ganaría tiempo para negociar restricciones sobre Musk.
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La amarga división intrapartidista se reflejó en la votación de procedimiento del Senado. Vulnerables demócratas moderados como Jon Ossoff, de Georgia, que se presenta a la reelección en un estado ganado por Trump el año que viene, votaron en contra de abandonar el bloqueo, al igual que moderados como Mark Warner, de Virginia, y Mark Kelly, de Arizona. El voto les ayudará a protegerse de posibles desafíos en las primarias por parte de los progresistas, al igual que la aprobación del proyecto de ley les protegerá de la culpa por un cierre.
Leales a Schumer como Kirsten Gillibrand, de Nueva York, y el retirado Gary Peters, de Michigan, optaron por soportar el calor de la base política del partido y votaron a favor de poner fin al bloqueo para mantener abierto el gobierno.
“Cerrar el gobierno no es la respuesta”, dijo Catherine Cortez Masto, de Nevada, otra senadora demócrata que se unió a Schumer.
Schumer argumentó que un cierre perjudicaría tanto al país como a su partido minoritario, desviando la atención del dolor económico causado por los aranceles de Trump.
“No creo que sea tan popular en septiembre como lo es hoy”, dijo Schumer. La línea de razonamiento reflejaba un influyente ensayo de opinión del estratega demócrata James Carville que aconsejaba a los demócratas “hacerse los muertos” durante un tiempo y dejar que Trump fracasara.
Trump, que aún debe firmar el proyecto de ley, elogió a Schumer en una publicación en las redes sociales que probablemente avivará la ira entre los críticos demócratas del senador.
“¡Felicitaciones a Chuck Schumer por hacer lo correcto: tuvo ‘agallas’ y coraje!”. dijo Trump. “¡Esto podría conducir a algo grande para EE.UU., una dirección y un comienzo totalmente nuevos!”.
El Senado ahora se centrará en los recortes de impuestos, que son el centro de la agenda legislativa de Trump. Los demócratas no tendrán capacidad para bloquear esta legislación, que no puede ser obstruida.
Con la colaboración de Alicia Díaz.
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