Bloomberg — Más de 60 personas murieron el martes por la noche a causa de una de las peores tormentas en décadas en el este de España.
La tormenta es “una de las tres más fuertes del último siglo en la región de Valencia”, dijo el miércoles la agencia meteorológica española en un post en X. Los servicios de emergencia trabajaron toda la noche para rescatar a personas mientras las inundaciones bloqueaban el tráfico en las carreteras y los servicios de comunicaciones se colapsaban.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocó el miércoles un comité de crisis gubernamental. “Os ayudaremos con todos los recursos del Estado”, dijo en un discurso.
Los legisladores reunidos en el Parlamento en Madrid suspendieron su sesión a media mañana para mostrar su apoyo a la región.
“Es una situación sin precedentes, nadie ha visto algo así”, dijo el presidente regional de Valencia, Carlos Mazón. Según el Gobierno regional, hasta las 12:15 hora local se habían registrado 62 muertos.
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Valencia tiene un historial de desastres causados por la lluvia, con una tormenta a finales de la década de 1950 que mató a más de 80 personas. Pero el número de muertos de esta semana convierte a la tormenta actual en la mayor catástrofe natural de la historia reciente de España.
El miércoles por la mañana se interrumpieron los servicios ferroviarios hacia y desde Valencia, se bloquearon las carreteras y los equipos de rescate siguieron ayudando a decenas de personas atrapadas en autos y encima de vehículos y edificios.
Ford Motor Co. (F) detuvo la producción en su planta de Almussafes en la región y canceló todos los turnos debido a la tormenta, según un portavoz de la empresa. Está previsto que la producción se reanude el 11 de noviembre.
Aunque otras partes de España se vieron afectadas por la tormenta, se espera que la intensidad de las precipitaciones sea menor.
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Valencia es la cuarta mayor de las 17 regiones españolas, con cinco millones de habitantes. Es una gran productora de naranjas y arroz, y uno de los principales destinos turísticos del país durante la temporada de verano.
Este tipo de tormenta, conocida en España como Dana, se desarrolla “como resultado del paso de aire más frío sobre el cálido océano Mediterráneo, creando inestabilidad atmosférica y trayendo consigo lluvias torrenciales”, explica Jess Neumann, profesor asociado de hidrología en la Universidad de Reading. “Este tipo de tormentas pueden desarrollarse rápidamente y con un aviso relativamente corto”.
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