Bloomberg — Los soldados norcoreanos han comenzado a luchar contra Ucrania junto a sus aliados rusos, según ha declarado el Departamento de Estado de EE.UU., después de que Pyongyang enviara miles de soldados a la región rusa de Kursk para ayudar a los esfuerzos bélicos del Kremlin.
“Hoy puedo confirmar que más de 10.000 soldados de la RPDC han sido enviados al este de Rusia, y la mayoría de ellos se han trasladado al extremo occidental del óblast de Kursk, donde han comenzado a participar en operaciones de combate con las fuerzas rusas”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel, en una sesión informativa el martes, utilizando las iniciales del nombre oficial del Norte.
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Es la primera vez que EE.UU. confirma que tropas norcoreanas participan directamente en el conflicto, después de que funcionarios ucranianos dijeran anteriormente que sus fuerzas se habían enfrentado a tropas norcoreanas en combate. El Ministerio de Defensa de Corea del Sur no confirmó inmediatamente el enfrentamiento.
Rusia ha entrenado a los soldados norcoreanos en artillería, drones y otras habilidades necesarias para las operaciones en primera línea, pero queda por ver lo bien que se integrarán las dos fuerzas cuando luchen una junto a la otra, dijo Patel.
"Algunos de los retos que tendrían que superar son la interoperabilidad, la barrera del idioma, el mando y el control, y las comunicaciones", dijo.
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Rusia ha estado presionando más para desalojar a las fuerzas ucranianas de Kursk, zonas que las fuerzas de Kiev capturaron en una incursión sorpresa en agosto, a medida que crece la preocupación en Kiev sobre el futuro del apoyo estadounidense tras la victoria electoral de Donald Trump.
Trump había dicho en la campaña electoral que, de ser elegido, negociaría un rápido final de la guerra, lo que suscitó el temor en Kiev de que Ucrania se viera abocada a un acuerdo que congelara el conflicto en su estado actual, dando tiempo al Kremlin para rearmarse y renovar su asalto.
El ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Andrii Sybiha, declaró el sábado que se estaban realizando planes preliminares para organizar una reunión entre el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, y el presidente electo. No estaba claro de inmediato si se estaba planeando una reunión para antes o después de la toma de posesión de Trump en enero.
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