Bloomberg — Una campaña de la derecha para limitar la población de Suiza es “peligrosa” y amenaza la capacidad de las empresas para atraer a los mejores talentos, dijo la jefa de finanzas del país.
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La inmigración es desde hace tiempo un tema candente en Suiza. El Partido Popular Suizo, de extrema derecha y el más importante del país, está detrás de una iniciativa para limitar el número de habitantes a 10 millones que probablemente estará en las urnas a partir de 2026.
Pero la propaganda que respalda la iniciativa se basa en un concepto erróneo, según declaró el jueves la ministra de Finanzas, Karin Keller-Sutter, en un acto organizado por Bloomberg.
“Cuando la gente habla de inmigración o migración, lo que quieren decir es solicitantes de asilo”, dijo. “No se refieren realmente al personal cualificado de los hospitales, a los médicos que necesitamos. No podríamos trabajar sin ellos”.
Más de uno de cada cuatro residentes suizos es extranjero, una de las tasas más altas de Europa. El año pasado, unas 180.000 personas inmigraron a Suiza, la mayoría por motivos de trabajo. La población suiza alcanzó recientemente los 9 millones de habitantes.
“Los extranjeros han contribuido significativamente a compensar la escasez de mano de obra cualificada y no cualificada”, declaró la Oficina Federal de Migración.
La propuesta de tope de población no distingue entre los recién llegados que llegan por trabajo y los que buscan huir de la guerra o la pobreza. Esto choca con las necesidades de las empresas suizas, que dependen del talento procedente del extranjero. Los ejecutivos han advertido de que un tope de población obligaría a las empresas a expandirse en otros lugares en lugar de en Suiza.
“Tenemos que contratar gente. Y si no podemos conseguirlos en Suiza, tenemos que contratarlos en otra parte”, ha dicho el mes pasado el director general de Roche Holding AG, Thomas Schinecker. “No lo digo como una amenaza, por cierto. Es simplemente una realidad”.
En el acto del jueves en Zúrich, Keller-Sutter dijo que también existe una "responsabilidad de las empresas suizas de intentar contratar a suizos siempre que sea posible". Pero reconoció que el envejecimiento de la población del país plantea un reto.
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