Bloomberg — El debilitamiento del yuan por debajo de un nivel que China había estado defendiendo durante todo diciembre ha vuelto a poner el foco en su tasa de referencia diaria para la moneda gestionada, a fin de medir el apetito de Pekín por apoyarla.
Los operadores de divisas están a la espera de ver si el Banco Popular de China fijará la llamada tasa de referencia en un nivel más débil que 7,2 por dólar, una línea muy observada, alrededor de la cual el yuan puede operar en un rango del 2%. El Banco Popular de China (PBOC) mantuvo el apoyo el viernes, pero el yuan en el mercado interior rompió el hito psicológico de 7,3 por dólar por primera vez desde finales de 2023, en medio de las preocupaciones por las dificultades económicas de China y un creciente descuento en los rendimientos de los bonos frente a los de EE.UU.
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La tasa de referencia es la herramienta preferida de Pekín para guiar las expectativas del yuan y ha sido más fuerte que 7,2 desde las elecciones de EE. UU., en medio de la presión de un dólar en ascenso y un aumento en las predicciones de los analistas de que el banco central cedería. Permitir una ruptura de ese nivel corre el riesgo de enviar una señal a los operadores de que el PBOC está cómodo con una mayor debilidad del yuan, mientras que mantener la línea sugiere que podría resistir con la estabilidad de la moneda como objetivo.
Mientras el yuan se ha debilitado frente al dólar, ha subido al nivel más alto desde 2022 frente a las tasas de cambio de sus socios comerciales como resultado del control de Pekín. Este movimiento podría socavar la competitividad exportadora del país.
La moneda china cotizó justo por encima del nivel de 7,32 por dólar en el mercado interior el viernes.
“Todos los ojos están puestos en el PBOC el lunes y en la tasa de referencia del yuan chino”, dijo Bob Savage, jefe de estrategia de mercados e información en BNY en Nueva York. “El riesgo para el mercado ahora es que el dólar llegue a 7,45 o más frente al yuan”.
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