Bloomberg Línea — El domingo 28 de julio, más de 21,4 millones de venezolanos están habilitados para acudir a las urnas en unos comicios que podrían darle al presidente Nicolás Maduro otros seis años en el poder o poner fin a más de dos décadas de políticas socialistas que alguna vez impulsaron con éxito los programas contra la pobreza, pero que eventualmente empujarían al país sudamericano a varias crisis en curso.
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En los últimos diez años, más de 7,7 millones de venezolanos han salido del país buscando protección y una mejor vida, dice el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
La mayoría ha sido acogida por países de América Latina y el Caribe. En Colombia, los migrantes venezolanos pasaron de ser 23.573 personas en 2014 a 2,8 millones en 2023, según Migración de ese país.
De cara al proceso electoral, distintas instancias estimaban más de 4,5 millones de electores potenciales en el extranjero, pero el Registro Electoral, por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), reveló que sólo unos 69.189 migrantes podrán ejercer su derecho al voto ese día.
España con una población de 438.000 venezolanos residenciados encabeza la lista con 24.756 empadronados. Le sigue Colombia con 7.012 electores, luego México con 3.215, Chile con 2.659 y Argentina con 2.639 de votantes registrados, de acuerdo con el padrón electoral definitivo.
Vía X, el líder político exiliado David Smolansky dijo que los venezolanos en el exterior excluidos del derecho al voto equivalen al 22% de todos los electores, una población electoral similar a la de los estados Miranda y Zulia, los dos más grandes del país. “El régimen hizo del ‘estado más grande’ (la diáspora), el más pequeño”, reclamó el también exalcalde de El Hatillo, al tiempo de considerar que Maduro “ha ejecutado un apartheid migratorio a quienes hemos huido del país”.
Una situación similar se dio en el proceso electoral de 2018, cuando sólo estaban inscritos 107.284 venezolanos de los más de 4 millones que entonces residían en el extranjero.
La diáspora ha denunciado en redes sociales la falta de información sobre el proceso en sus consulados, así como la existencia de requisitos estrictos que hicieron muy difícil, incluso imposible, su registro en el padrón electoral.
“Las trabas que hace el régimen de Nicolás Maduro son cada vez más, porque están claros que la mayoría de los venezolanos que estamos afueras somos un contrapeso”, dijo Anthoni Piña, venezolano radicado en Lima, Perú.
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