Bloomberg — Venezuela prometió a Brasil que respetaría la integridad de la embajada argentina en Caracas, incluidos los seis opositores al gobierno de Nicolás Maduro que se han refugiado dentro de la misión diplomática, según un funcionario brasileño con conocimiento del asunto.
Brasil asumió la custodia de la embajada esta semana después de que Maduro expulsara a los diplomáticos argentinos en respuesta a las críticas del presidente Javier Milei a su autoproclamada victoria electoral.
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La misión diplomática se ha convertido en un punto álgido en las relaciones regionales mientras los gobiernos deciden cómo responder al endurecimiento de la represión de la disidencia por parte de Maduro tras las elecciones.
Brasil también se dispone a asumir la responsabilidad diplomática de la embajada peruana, después de que Maduro expulsara a su personal diplomático tras la votación, según dos funcionarios familiarizados con la situación.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva, por su parte, mantendrá una llamada con el mexicano Andrés Manuel López Obrador y el colombiano Gustavo Petro este jueves por la tarde para intentar concluir un comunicado conjunto pidiendo la divulgación de las actas completas de las elecciones, dijeron estas personas, que solicitaron el anonimato para discutir asuntos internos.
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Maduro también ha pedido una llamada con Lula, aunque Brasil la está organizando para después de la discusión con Petro y López Obrador, dijeron las personas.
El Ministerio de Información de Venezuela no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Más temprano este jueves, Milei agradeció a Brasil por tomar custodia de la embajada de Argentina en Caracas, en la que se refugian ayudantes del líder opositor venezolano.
El personal diplomático argentino está abandonando el país tras ser expulsado por Maduro, dijo Milei el jueves en un post en X. Las órdenes de expulsión son una represalia por la condena del gobierno argentino al "fraude" electoral en Venezuela, agregó Milei.
“No tengo dudas de que pronto reabriremos nuestra embajada en una Venezuela libre y democrática”, dijo. “Los lazos de amistad que unen a Argentina con Brasil son muy fuertes e históricos”.
Además de Argentina y Perú, Maduro también dio a los diplomáticos de Chile, Uruguay, Costa Rica, Panamá y República Dominicana hasta el viernes para abandonar el país.
Aunque se ha declarado ganador de las elecciones del domingo, la candidata proscrita María Corina Machado dice que tiene pruebas de que su suplente, Edmundo González, ganó la votación del domingo pasado por un amplio margen.
La principal diplomática estadounidense para el hemisferio occidental dijo el miércoles por la noche ante la Organización de Estados Americanos que González derrotó a Maduro “por millones de votos” y que los gobiernos del mundo deberían reconocer la “abrumadora victoria” de la oposición venezolana.
Media docena de asesores de Machado han pedido asilo en la embajada argentina desde marzo, y patrullas de la policía venezolana habían estado rodeando el edificio mientras Maduro reprimía la disidencia tras la disputada votación.
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"La custodia de la sede diplomática involucra a los asilados políticos de la oposición venezolana", dijo la cancillería argentina en un comunicado en el que detalló la salida de su personal y la supervisión de sus instalaciones por parte de Brasil.
El lunes, el principal asesor de asuntos exteriores de Lula dijo a Maduro en una reunión privada que la embajada argentina debía ser protegida, según funcionarios del gobierno familiarizados con el asunto.
El gobierno de Brasil también está en conversaciones con Uruguay sobre la salvaguarda de sus activos diplomáticos en Venezuela, dijeron funcionarios.
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Machado agradeció a Brasil su disposición a ayudar a resolver el enfrentamiento de la embajada, diciendo a última hora del miércoles en un mensaje a X que podría contribuir a una solución negociada de la disputa electoral más amplia. Sus ayudantes dijeron el jueves por la mañana que la bandera de Brasil ya había sido izada sobre la misión diplomática.
Milei, por su parte, ha tenido una relación rocosa con Lula. Ambos han intercambiado púas por sus diferencias ideológicas desde la campaña electoral argentina del año pasado.
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