Caracas — La caída del consumo de la actividad comercial en Venezuela luego del incipiente crecimiento el año pasado ha causado un impacto negativo, sin expectativas de mejora. Economistas, sin embargo, han insistido en que para el cierre de 2023, se podría experimentar en el país una nueva y leve recuperación.
En el más reciente informe de Focus Economics, las proyecciones para Venezuela este año refieren un crecimiento de su economía de 3%, lo que significa una importante disminución frente al 15% del año pasado según datos oficiales.
Aún así, la cifra que ofrece la consultora de análisis y previsiones económicas de 127 países resulta positiva tras la contracción experimentada por la nación caribeña de hasta 80% entre 2013 y 2020. La compañía además reporta que este balance se mantendrá para 2024, con una estimación de expansión para el Producto Interno Bruto venezolano de 3,7%.
Focus Economics igualmente advierte que la inflación en Venezuela podría cerrar en 244% mientras que la tasa de cambio paralela se ubicaría en US$59 por bolívar.
Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica, quien compartió estos resultados en sus redes sociales explica que si bien podría darse una mejora en el consumo privado, también se podría percibir una aceleración de la devaluación y la inflación. A partir de ello, hace un llamado a las previsiones.
“Esperamos una mejora en el consumo, focalizado principalmente en alimentos, cuidado personal y sector salud, también focalizada en la región central, pero hay que tener mucho cuidado en optimizar la estrategia comercial y financiera”, alerta Oliveros al empresario privado.
Este comportamiento viene acompañado de un aumento del gasto público por parte del gobierno venezolano, de acuerdo a Jesús Palacios, economista senior de Ecoanalítica, quien ve además repuntes en el tipo de cambio como consecuencia, que podría triplicar su valor 2 ó 3 veces al actual.
“El poder adquisitivo no lo vemos variando mucho. Las empresas están ajustando márgenes y los precios en dólares no están subiendo tanto precisamente por que la gente tiene un poder de compra muy limitado. Estamos en un país donde casi el 60% de personas empleables reciben menos de US$100 al mes y casi 85% menos de US$300, y corregir eso requiere tiempo y cambios estructurales en la economía”, agrega Palacios en contacto con Bloomberg Línea.
La consultora financiera Albus Data ha destacado por su parte que no espera mayores variaciones en el comportamiento de la economía para el último trimestre del año en comparación con el mismo período el año pasado.
El director cofundador de Albus Data, Henkel García sí se refirió a una desaceleración de la inflación que podría llegar hasta 250-240% para el cierre de 2023, y una proyección en el tipo de cambio similar a la presentada por Focus Economics, entre US$50 y US$60 por bolívar.
Desde el gobierno de Nicolás Maduro se ha continuado atribuyendo el retroceso económico a la caída de los ingresos por causa de las sanciones económicas por parte de Estados Unidos, pese a la flexibilización en varias de ellas que incluye la comercialización de crudo venezolano por parte de Chevron Corp.
En relación al aumento salarial que suma más de un año sin cambios, desde marzo de 2022, los analistas consideran que podría haber un ajuste más cercano a la próxima elección presidencial en 2024, en búsqueda de una mejora en términos de consumo, y tratando de acumular recursos para evitar que ese aumento genere una escalada de inflación y devaluación.