Bloomberg Línea — Los uruguayos no solo escogerán a su próximo presidente en las elecciones nacionales del 27 de octubre, o en su defecto, a los dos candidatos que avanzarán a segunda vuelta. En simultáneo, se realizarán dos plebiscitos para reformar la Constitución Política, que buscan cambiar el sistema de seguridad social y permitir que las autoridades ejecuten allanamientos nocturnos.
Una vez en el cuarto secreto, los ciudadanos podrán tomar dos papeletas con el monosílabo “Sí”: la de color amarillo, permitirá manifestar su posición a favor de la reforma al sistema de seguridad social, y la blanca, su apoyo a los allanamientos en las noches como medida para combatir la criminalidad.
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A diferencia de un referéndum, las papeletas no tendrán la opción “No” para quienes estén en desacuerdo con lo que está consignado en ellas. Para que las reformas constitucionales se hagan efectivas, en las urnas debe haber al menos el 50% más uno de las papeletas por el sí al final de la jornada.
Quienes no apoyen las iniciativas, sencillamente deben abstenerse de depositar las papeletas en las urnas, acción que será tomada como un voto a favor del “No”.
El plebiscito para cambiar el sistema de seguridad social
La propuesta de cambiar el sistema de seguridad social busca, entre otras, reducir la edad necesaria para pensionarse en Uruguay a los 60 años, y surgió como respuesta a la más reciente reforma jubilatoria, que elevó gradualmente la edad a los 65 años.
La iniciativa, surgida del Plenario Intersindical de Trabajadores - Convención Nacional de Trabajadores (PIT-CNT), es decir, la única central sindical nacional de Uruguay, también contempla fijar que la pensión más baja equivalga a un salario mínimo y la eliminación de las privadas Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional (AFAP).
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A falta de escasos días para que la ciudadanía demuestre en las urnas si está a favor de la iniciativa, lo cierto es que ni siquiera líderes progresistas, como el candidato presidencial del partido opositor Frente Amplio, Yamandú Orsi, la consideran conveniente.
“Sin dudas no es la situación más conveniente y va a generar dificultades”, expuso el pasado septiembre, durante una gira por el departamento de Salto.
El actual presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, se suma a quienes piensan que la reforma no es oportuna. En una conferencia de prensa en Colonia del Sacramento, el pasado 16 de octubre, dijo a Bloomberg Línea que, de aprobarse, “va a suceder un encadenamiento de cosas negativas (...). El ambiente económico va a ser dañado”.
El plebiscito para permitir allanamientos en las noches
El progresismo político uruguayo también se opone a esta reforma, puesto que reformaría el artículo 11 de la Constitución, que consigna: “El hogar es un sagrado inviolable. De noche nadie podrá entrar en él sin consentimiento de su jefe, y de día, solo de orden expresa de Juez competente, por escrito y en los casos determinados por la ley”.
Quienes sí están impulsando esta reforma constitucional son los afines al presidente Luis Lacalle, de hecho, la propuesta surgió de un senador del Carlos Camy, del Partido Nacional, al que pertenece el primer mandatario uruguayo.
De recibir luz verde por parte de la ciudadanía en el plebiscito, las autoridades podrán realizar allanamientos nocturnos por orden de un juez competente y bajo la creación de una regulación para evitar abusos de la Policía durante los procedimientos.
