Perú teme que cumbre de APEC pueda verse afectada por protestas contra la inseguridad

Transportistas han protagonizado varios días de huelga que han paralizado Lima, interrumpiendo escuelas, lugares de trabajo y hospitales

¿Podrá Perú aislar su economía del ruido político? Las amenazas a su estatus de mercado estable
Por Marcelo Rochabrun
25 de octubre, 2024 | 06:54 PM

Bloomberg — El gobierno de Perú está cada vez más preocupado de que las recientes protestas contra el crimen puedan extenderse hasta el próximo mes e interrumpir una cumbre de líderes mundiales de la región de Asia-Pacífico.

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El presidente del Consejo de Ministros del Perú, Gustavo Adrianzen, pidió el viernes a los peruanos que se “abstengan” de protestas o marchas a mediados de noviembre, cuando la capital, Lima, será sede de una cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, que podría incluir al presidente chino, Xi Jinping, el presidente estadounidense, Joe Biden, y el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.

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“Perú estará en exhibición ante el mundo, y tenemos que mostrarles nuestra mejor imagen”, dijo Adrianzen a los periodistas. “Sería muy lamentable que en esos días que recibimos visitantes de las 21 economías más poderosas del mundo, les demos un mal espectáculo, un espectáculo de conflicto”.

La presidenta de Perú, Dina Boluarte, ha ido de crisis en crisis durante sus tumultuosos dos años de presidencia. Se ha enfrentado a acusaciones de permitir que las autoridades mataran a unos 50 manifestantes al principio de su mandato, de enriquecimiento ilegal con un juego de relojes Rolex y ahora se enfrenta a protestas recurrentes por un aumento de las redes de extorsión.

Desde septiembre, los conductores de autobuses han protagonizado varios días de huelga que han paralizado Lima, interrumpiendo escuelas, lugares de trabajo y hospitales. El gobierno ha dicho que está trabajando para resolver el problema de la extorsión -varios conductores han sido asesinados por negarse a pagar-, pero hasta ahora no ha logrado encontrar una solución.

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Pero Boluarte se enfrenta a esta última crisis en su momento más débil, ya que su popularidad ha caído a un mínimo histórico del 4%, según una encuesta de Ipsos de este mes. Es la más baja de América Latina y una de las tasas de aprobación más bajas de cualquier líder mundial.

“Por favor, hago un llamado de la manera más fraternal a los manifestantes para que durante esos días se abstengan de participar en marchas y protestas, para que nuestros visitantes puedan sentirse seguros”, agregó Adrianzen.

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