Ciudad de Panamá — Grupo Unidos por el Canal (Gupsa), el consorcio que realizó la ampliación del Canal de Panamá y que demandó a la vía interoceánica, tendrá que pagarle US$20,6 millones a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) en concepto de costos y gastos legales del arbitraje de las compuertas, mano de obra y otros.
De acuerdo con el laudo final, citado por la ACP, el consorcio podría tener derecho a un monto aproximado de hasta US$34,9 millones si está sujeta a lo que el tribunal arbitral del Arbitraje de Perturbaciones decida sobre las reclamaciones de los relacionadas con la solicitud de extensión de tiempo en dicho arbitraje.
Liderado por la española Sacyr y conformado por la empresa Impregilo de Italia, Jan De Nul de Bélgica y CUSA de Panamá, Grupo Unidos por el Canal firmó en el 2009 el contrato de construcción de las nuevas esclusas por US$3,118 millones, y el costo total de ampliación de la vía interoceánica se firmó por US$5,250 millones.
La decisión de los árbitros reafirma lo establecido por la ACP en cuanto a que no tiene la obligación de pagar $34,9 millones que los demandantes alegaban en este momento, pues está sujeto a la decisión del tribunal arbitral de perturbaciones, indicó la entidad en un comunicado.
“La ACP continuará ejerciendo todas las acciones que en derecho le asisten para defender sus intereses”, cita la nota oficial, que aborda la decisión del tribunal del arbitraje de compuertas, mano de obra y otros, cuya decisión se hizo pública este 30 de agosto.
El consorcio Gupcsa ha interpuesto contra la ACP cinco arbitrajes bajo el Reglamento de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional (CCI), con sede en Miami, Estados Unidos, de los cuales cuatro de ellos concluyeron con laudos arbitrales a favor de la ACP.