Ciudad de México — Unifin, una financiera no bancaria mexicana, presentó una nueva propuesta de convenio concursal, con el que busca salir del Concurso Mercantil como una compañía operante, tras un intento fallido en octubre en medio de la resistencia de un grupo de bonistas.
La compañía considera que la versión definitiva del convenio concursal le permitirá, “salir del Concurso Mercantil como negocio en marcha, maximizando la recuperación de todos los acreedores reconocidos”, dijo Unifin en un comunicado.
El nuevo plan frente a los acreedores abre la posibilidad del acceso al 20% del capital social de lo que sería la nueva Unifin, ampliando, si se cumplen ciertas condiciones, la propuesta inicial que consideraba el 15%, de acuerdo con un resumen del acuerdo publicado por la empresa.
Las modificaciones, que aún deben ser aprobadas por el juez concursal, también consideran ajustes a los términos de la nueva deuda que emitirán las instituciones de la banca de desarrollo Bancomext y Nacional Financiera (Nafin), también acreedores, a la compañía.
Además, la nueva propuesta permite a los tenedores de sus bonos, algunos de los cuales rechazaron el planteamiento previo, decidir si suscriben un nuevo instrumento de deuda con Unifin o recibir el tratamiento como deudores no garantizados, lo que les haría objeto de distribuciones de efectivo.
Los tenedores de UNIFIN 00122 y UNIFIN 00422 se reunirán el 26 de diciembre, en respectivas asambleas, para discutir y votar esta nueva versión de convenio concursal, de acuerdo con las convocatorias publicadas en la Bolsa Mexicana de Valores.
Unifin confirmó el 14 de diciembre a Bloomberg Línea que se encontraba en las fases finales de negociación del Convenio Concursal.
Unifin decidió en agosto de 2022 poner en pausa el pago a acreedores, cuyo monto ascendía a US$2.300 millones ante la falta de fuentes de financiamiento y comenzar a armar un plan de reestructura financiera donde buscaba continuar con las operaciones de la compañía.
La empresa fue declarada en Concurso Mercantil el 4 de enero, activando una etapa de conciliación con sus acreedores.