Ciudad de México — Grupo México Transportes, la subsidiaria ferroviaria de Grupo México, dijo que la toma de las instalaciones de Ferrosur que realizó la Secretaría de Marina el 19 de mayo, se dio en medio de negociaciones luego de que el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) desechó un acuerdo previo para el uso compartido de esas instalaciones.
La ferroviaria explicó, en un comunicado, que a inicios de 2022, la empresa firmó un acuerdo con las secretarías de Gobernación y Comunicaciones y Transportes, que consideraba la construcción de una segunda vía, que sería operada con independencia por el Gobierno. El costo del proyecto, de cientos de millones de pesos, sería cubierto mediante las regalías que paga la empresa al Gobierno cada año.
“El acuerdo fue desechado por el Gobierno meses después”, dijo la empresa, encabezada por Germán Larrea. “La empresa ferroviaria del Estado ya tenía derecho de paso”.
La ocupación temporal del viernes 19 de mayo se dio en medio de las negociaciones para atender las preocupaciones del Gobierno sobre el acuerdo previo. De hecho, ese día se tenían programadas reuniones para continuar con la negociación, dijo la empresa.
La toma por parte de las Fuerzas Armadas, que se dio acatando un decreto del presidente Andrés Manuel López Obrador para la ocupación temporal para que la vía sea utilizada por el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, uno de los proyectos emblemáticos del su Gobierno.
La empresa se dijo abierta a continuar con las negociaciones.
“De no llegar a un acuerdo en la negociación, la ocupación temporal se convertirá en definitiva, en deterioro de la empresa, sus empleados, clientes y del libre mercado”, apuntó.