Ciudad de México — S&P Global Ratings revisó su perspectiva sobre Alfa (ALFAA), un conglomerado industrial mexicano enfocado a químicos y alimentos, debido a que la empresa no alcanzará los requisitos para subir su calificación crediticia, que se encuentra a un escalón del grado especulativo.
La perspectiva sobre Alfa fue modificada a estable desde positiva, lo que implica que durante los próximos 12 meses el negocio y la posición crediticia de la empresa se mantendrían sin cambios y dentro de las expectativas de desempeño de S&P.
“La trayectoria de desapalancamiento de Alfa se ha visto perjudicada por los resultados financieros más débiles de su subsidiaria petroquímica, Alpek, dado que su EBITDA ha caído por debajo de lo esperado debido a las condiciones de negocio menos favorables”, señaló S&P.
La decisión de S&P sobre Alfa implicó también una modificación en la perspectiva de la subsidiaria de alimentos Sigma, que también pasó a estable desde positiva.
La calificación crediticia de Alfa como emisor de largo plazo en escala global fue confirmada en BBB-, el último escalón dentro del grado de inversión, de acuerdo con un documento que fundamenta la decisión.
S&P Global Ratings tenía otra visión en junio de 2022 para Alfa, cuando subió su perspectiva de estable a positiva, abriendo la probabilidad de un alza en la calificación crediticia en los siguientes 12 meses.
Para concretarlo, Alfa debía registrar los supuestos de un índice de deuda ajustada a EBITDA en alrededor de 2x y un índice de flujo de efectivo discrecional a deuda superior a 15%.
Ahora la perspectiva de S&P para Alfa apuntan a que mantenga un índice de deuda consolidada a EBITDA de cerca de 3x al cierre de 2023 y de 2,7x en 2024. El flujo de efectivo discrecional a deuda se mantendría por debajo de 10%.
Presiones en Alpek
S&P dijo que uno de los motivos para el cambio en su perspectiva se vincula a la situación de Alpek (ALPEKA), la subsidiaria petroquímica de Alfa.
Ese negocio de plásticos ha registrado caídas en su rentabilidad motivadas por ajustes en el precio del poliéster, un retroceso en los precios de plásticos y químicos y una menor demanda de PET, de acuerdo con analistas de Monex en una nota de julio, tras la publicación de los resultados trimestrales de Alpek del segundo trimestre.
En los primeros seis meses del 2023, Alpek contrajo en 65% su flujo operativo o EBITDA, una medida de rentabilidad operativa. La empresa redujo su guía de EBITDA para el año. Inicialmente la empresa esperaba cerrar el 2023 con un flujo operativo de US$920 millones, ahora la expectativa es de US$770 millones.
En medio de estas presiones, Alpek anunció recientemente el cierre de una de sus plantas de producción de filamentos, ubicada en Monterrey. A principios de año, cesó por tiempo indefinido las operaciones de una planta de resina PET ubicada en Charleston, Carolina del Sur.