Ciudad de México — Unifin Financiera, una compañía mexicana que atravesó por un proceso de Concurso Mercantil, anunció la renuncia de Rodrigo Lebois a la presidencia del Consejo de Administración.
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El empresario, quien fundó Unifin en 1993, será sustituido por Eugene Irving Davis, un especialista en reestructuración empresarial, según los acuerdos de asamblea publicados hoy por la compañía.
La participación del experto se da ante la formalización de la que será la siguiente etapa de Unifin y los planes de reactivar las operaciones de financiamiento a empresas pequeñas y medianas.
Davis, quien encabeza la firma de consultoría Pirinate Consulting Group, actualmente forma parte del Consejo de Administración de Grupo Aeroméxico, una aerolínea que enfrentó recientemente una reestructuración financiera bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, un proceso similar al Concurso Mercantil mexicano.
El nombre del directivo también ha resonado en el caso de Altos Hornos de México (AHMSA), una acerera mexicana que pasa por problemas financieros. Davis fue considerado para sustituir en la presidencia del Consejo de Administración a Alonso Ancira, un movimiento que estaba sujeto al cumplimiento de ciertas condiciones y que hasta el momento no se tiene registro público de que se hayan formalizado.
A la salida de Lebois del Consejo de Administración se suman también las de Sergio José Camacho y de Rodrigo Balli, directivos clave en la empresa. El organismo mantendrá a sus tres consejeros independientes: José Manuel Cayetano Sebastián González Sordo, Enrique Ponzanelli y Rafael Cancino.
Durante la asamblea de accionistas, realizada el 30 de julio con una asistencia del 51,58%, también se aprobaron diversos informes, así como los últimos estados financieros anuales, que registran que Unifin obtuvo una pérdida de poco más de MXN$4.035 millones (aproximadamente US$217 millones) en 2023, un año marcado por el Concurso Mercantil.
Unifin culminó en enero de 2024 este proceso judicial luego de que un juez aprobó el convenio al que llegó con acreedores, a quienes dejó de pagar en agosto de 2022 debido a la falta de liquidez. El Concurso Mercantil permitió a la empresa negociar con acreedores bajo la protección judicial.
El acuerdo alcanzado consideró un financiamiento de salida otorgado por Bancomext y Nafin, dos instituciones de la banca de desarrollo del Gobierno de México, por MXN$4.451 millones de línea senior (aproximadamente US$260 millones) y MXN$200 millones de línea contingente (US$11,6 millones). El acuerdo también incluye la cesión del control de hasta 80% de la nueva empresa a sus acreedores.
El concurso mercantil de Unifin se dio en el marco de los problemas de algunas financieras no bancarias mexicanas para pagar a sus acreedores, como Crédito Real, Alpha Credit y más recientemente, Tangelo Pomelo Group, anteriormente conocida como Mexarrend.
