Reforma judicial limitará la influencia criminal en los tribunales: AMLO

Se espera que la presidenta electa Claudia Sheinbaum continúe impulsando muchas de las propuestas de reforma constitucional de AMLO después de que asuma el cargo el 1 de octubre.

Sexto Informe de Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Ciudad de México, 1 de septiembre de 2024.
Por Scott Squires
01 de septiembre, 2024 | 05:10 PM

Bloomberg — La propuesta de reforma al Poder Judicial de México garantizará que los tribunales trabajen en beneficio del pueblo mexicano y no para el crimen organizado, dijo el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador en un discurso el domingo en la Ciudad de México.

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La reforma, que propone que los jueces de México sean elegidos en lugar de designados, garantizará que el Poder Judicial “administre justicia en beneficio de todos y que los tribunales no estén al servicio del crimen organizado o de los delincuentes de cuello blanco”, dijo López Obrador a miles de simpatizantes frente al Palacio Nacional. “Estarán al servicio del pueblo”.

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En el discurso de casi dos horas sobre el informe de Gobierno AMLO, como se le conoce al presidente, también promocionó los logros de su administración en materia de reducción del crimen, inmigración, proyectos de energía e infraestructura y reducción de la pobreza durante su mandato de seis años que termina este mes.

Se espera que la presidenta electa Claudia Sheinbaum continúe impulsando muchas de las propuestas de reforma constitucional de AMLO después de que asuma el cargo el 1 de octubre.

La semana pasada, una comisión clave de la Cámara de Diputados aprobó el plan de AMLO para reformar el sistema judicial mexicano, allanando el camino para que el Congreso considere la controvertida propuesta que, según los opositores, pondrá en riesgo la democracia.

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El plan es una prioridad para el presidente, que lo ha caracterizado como una forma de erradicar la corrupción judicial, y quiere asegurar su aprobación antes de dejar el cargo.

El plan ha generado reacciones negativas de los jueces, la oposición mexicana, los inversionistas y Estados Unidos, quienes dicen que socavará la independencia judicial y erosionará los controles sobre el poder del partido gobernante Morena.

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