Ciudad de México — Moody’s Investor Service rebajó la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex) de B1 a B3, un nivel altamente especulativo considerado como bono basura.
Los crecientes requisitos de liquidez, aumento de costos y los vencimientos de deuda reflejan la baja de calificación de la petrolera estatal mexicana dirigida por Octavio Romero Oropeza, señaló Moody’s en un reporte.
Pero la agencia calificadora señaló otros factores relevantes en su decisión: el negocio de refinación y la exposición de Pemex a riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG por sus siglas en inglés).
“La empresa enfrenta riesgos comerciales cada vez mayores a medida que continúa ampliando su capacidad de refinación e intenta aumentar la producción”, precisó Moody’s.
La subsidiaria Pemex Transformación Industrial (TRI), encargada de operar las refinerías, acumula pérdidas por MXN$88.893 millones de enero a septiembre de 2023, y es la única división que registra números rojos, según su reporte de resultados financieros más reciente.
El Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador persigue la autosuficiencia de gasolina y diésel de México a través de Pemex, pero el tipo de petróleo crudo que produce es distinto al que pueden procesar las refinerías, por lo que han realizado rehabilitaciones sin alcanzar los resultados esperados.
Aunque construyó la refinería Dos Bocas y compró la totalidad de Deer Park en Texas, la primera sigue sin producir gasolina comercial y la segunda solo envía 15% de su producción a México porque es más rentable vender el combustible en Estados Unidos.
La refinación de petróleo de Pemex incumplió su meta durante 2023, la cual persigue superar el millón de barriles desde 2019.
Pemex prevé terminar la construcción de dos plantas coquizadoras en las refinerías de Tula y Salina Cruz para incrementar la producción de combustibles, pero las obras enfrentan retrasos que rebasarán el sexenio de López Obrador.
El Gobierno de AMLO y Pemex han criticado las evaluaciones de Moody’s y han pedido a la agencia que revise sus métricas ante las ganancias que ha reportado.
Riesgos ESG
Moody’s también tomó en cuenta que la falta de medidas de Pemex para reducir su exposición a riesgos ESG ha obligado a algunos bancos a limitar exponerse a la empresa.
Una investigación publicada por la Agencia Espacial Europea detectó que una plataforma marina de Pemex liberaba altos volúmenes de metano: durante 17 días, la plataforma Zaap-C envió 40.000 toneladas de metano, un gas de efecto invernadero, a la atmósfera durante diciembre de 2021.
El 1 de febrero de 2024, la petrolera fijó una meta de reducción de emisiones de gas de efecto invernadero de 48% para la producción de petróleo, 36% en procesos de refinación y 58% en complejos procesadores de gas en 2027.
Pemex regresó a los mercados con la emisión de deuda por US$2.000 millones en enero de 2023, pero en marzo, su CEO dijo que buscaban financiamiento más barato que el de los mercados de deuda.
La petrolera mexicana es la más endeudada del mundo con un pasivo financiero de US$106.500 millones, enfrenta vencimientos de US$10.900 millones pero la mayoría fue cubierta por una transferencia financiera del Gobierno mexicano asignada para su presupuesto de este año.
Pemex produce 1,8 millones de barriles diarios de petróleo crudo y condensados y mantiene reservas probadas en el orden de 7.400 millones de barriles de petróleo que alcanzan aproximadamente para nueve años.