Ciudad de México — La producción privada de petróleo crudo en México continúa estancada y lejos de la meta que plantearon las empresas para 2023, según las cifras más recientes publicadas por el regulador mexicano, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Durante junio, las compañías privadas extrajeron 104.400 barriles diarios, una caída mensual de 2%. En su comparación anual, la producción privada subió 6%
La compañía italiana Ente Nazionale Idrocarburi, conocida como ENI, lideró la producción del sector privado con la extracción de 33.400 barriles diarios, seguida por la petrolera de origen argentino Hokchi Energy.
El tercer lugar correspondió a Fieldwood Energy, la cual ha enfrentado un declive mayor al 50% de su producción hasta un nivel de 11.800 barriles diarios. Carlos Morales, CEO de la empresa socia Petrobal, explicó previamente a Bloomberg Línea que el consorcio enfrentaba problemas para conseguir plataformas autoelevables por la alta demanda mundial.
Otras compañías también han enfrentado retrasos y han solicitado prórrogas a la autoridad reguladora que preside Agustín Díaz Lastra.
Las empresas privadas aportan cerca del 5% de la producción nacional, mientras que la petrolera estatal Pemex proporciona el 95% restante de los 1,9 millones de barriles diarios de crudo y condensados que extraen en México.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), fijó una meta de 280.000 barriles diarios hacia el final de su sexenio en 2024 a la industria, durante una reunión con miembros del lobby energético en el país, la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi).
Amexhi planteó una meta anual para 2023 de 214.000 barriles diarios, pero no ha podido superar los 120.000 barriles diarios. A pesar de los efectos de la pandemia en la economía global y la industria energética, el grupo petrolero mantuvo sus pronósticos de producción.
El director de Amexhi, Merlin Cochran, dijo en 2022 que se publicarían nuevas estimaciones de producción, pero estas siguen sin publicarse.