Ciudad de México — Industrias Peñoles, una de las empresas mineras más grandes del país, reintegrará a 11 trabajadores a su subsidiaria Minera Tizapa, luego de que el Gobierno de Estados Unidos solicitó a México una revisión de las condiciones laborales, como parte del mecanismo de respuesta rápida del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
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La empresa también acordó pagar un bono de “continuidad operativa”, que originalmente se pagaba únicamente a los trabajadores afiliados al sindicato FRENTE, a 249 trabajadores que no lo habían recibido, señaló la Oficina de la Representante Comercial, Katherine Tai, en un comunicado.
“La activación del Mecanismo de Respuesta Rápida en la mina Minera Tizapa no sólo permitió que 11 trabajadores despedidos ilegalmente recuperaran sus empleos, sino que también garantizó que regresaran a un entorno diferente, libre de interferencias y discriminación de los empleadores”, dijo Katherine Tai, citada en el comunicado.
Tai solicitó a México en abril revisar las condiciones laborales de la mina propiedad de Industrias Peñoles, que forma parte de Grupo Bal.
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La solicitud fue motivada a su vez a una petición del Sindicato Minero, encabezado por el senador morenista Napoleón Gómez Urrutia, que señaló la supuesta negación de los derechos de libre asociación y negociación colectiva en Minera Tizapa, propiedad en 51% de Peñoles, pero en donde también las japonesas Dowa Mining y Sumitomo Corporation, tienen participación accionaria.
Tras la petición de investgación, Peñoles respondió que siempre ha respetado los derechos laborales y contribuirá a las investigaciones que active el Gobierno de México.
Minera Tizapa, ubicada en Zacazonapan, Estado de México, se dedica a la explotación y procesamiento de minerales con contenidos principalmente de zinc y plata.
