Ciudad de México — Petróleos Mexicanos, la petrolera estatal conocida como Pemex, refinó más de un millón de barriles diarios de petróleo crudo, luego de cinco años de retraso en alcanzar esa meta.
La compañía mexicana procesó 1,06 millones de barriles diarios durante marzo de 2024, un nivel no visto desde el mismo mes de 2016 cuando Pemex refinó 1,09 millones de barriles diarios.
La meta del millón de barriles diarios fue planteada por la entonces titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle —actual candidata a gobernadora del estado de Veracruz— quien dijo en múltiples ocasiones que su gestión esperaba cerrar 2019 con dicho nivel de refinación, objetivo que se pospuso año tras año en medio del retraso de obras y que Pemex también prometió.
El salto de Pemex fue impulsado por la refinería Salina Cruz, ubicada en el estado sureño de Oaxaca, la cual aumentó el proceso de 132.000 a 237.000 barriles diarios en marzo.
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En su comparación mensual, la refinación petrolera de Pemex subió 13%, mientras que en su medición anual incrementó 23%.
En enero de este año, Pemex informó en una presentación que sus seis refinerías en México refinarían un promedio anual de un millón de barriles por día. Actualmente el promedio es de 984.000 unidades diarias.
Pero el aumento en refinación va acompañado por más producción de petrolíferos altamente contaminantes con los que Pemex pierde dinero, principalmente de combustóleo. Otro factor determinante en la refinación de Pemex ha sido el cambio de tendencia en la producción petrolera de crudos ligeros hacia pesados, mientras que las refinerías estaban configuradas para procesar petróleos livianos.
La producción concentrada en petróleo pesado provoca que Pemex obtenga más combustóleo en sus refinerías en lugar de combustibles de alto valor como la gasolina y el diésel.
La llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México en diciembre de 2018 significó la aplicación de una política energética de rescate a Pemex, tras la apertura del sector petrolero a la inversión privada, luego de un monopolio de 75 años que terminó en 2013 con la reforma energética del expresidente priísta Enrique Peña Nieto.
Pero la empresa subsidiaria encargada de la refinación petrolera, Pemex Transformación Industrial, es la única división de la petrolera que reporta pérdidas cada trimestre.
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