Ciudad de México — Petróleos Mexicanos, la petrolera estatal conocida como Pemex, incumplirá la meta de producción de dos millones de barriles diarios de petróleo crudo y condensados al cierre de 2024, impuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante su última comparecencia ante la Cámara de Diputados, el CEO de la petrolera, Octavio Romero Oropeza, estimó una producción de 1,887 millones de barriles diarios para el próximo año, 6% o 116.000 barriles menos de la meta que fijó el mandatario mexicano.
La idea, comentó, es sostener la producción actual, en el orden de 1,885 millones de barriles diarios, hasta término de la administración.
“Los resultados están a la vista. Creo que son buenos resultados”, declaró el ingeniero agrónomo durante su discurso ante los legisladores.
El 21 de julio de 2023, AMLO, como se conoce al mandatario, mostró una gráfica con la producción estimada de Pemex para 2023 y 2024 durante su conferencia de prensa matutina.
“No queremos pasar de esto, vamos a dejar aquí —dos millones de barriles diarios—, porque tenemos que cuidar también este recurso, que es de todos y es de las generaciones venideras”, declaró el presidente mexicano.
Bloomberg Línea intentó consultar al directivo sobre el tema tras su comparecencia, pero evitó responder preguntas y abandonó el recinto legislativo ubicado en la Ciudad de México.
Romero Oropeza mencionó que Pemex, igual que el resto de la industria petrolera, enfrenta el problema de la declinación natural de los yacimientos, pero ha compensado la caída con nuevos desarrollos petroleros.
Los nuevos campos de Pemex en los últimos cinco años suman 586.000 barriles diarios de nueva producción, ocho veces más que toda la producción obtenida de los contratos de empresas privadas desde 2016, la cual asciende a 69.000 barriles diarios, sin considerar las migraciones contractuales.
“Todos los días declinan los yacimientos, y todos los días hay que meter producción nueva a través de nuevos pozos del desarrollo de nuestros campos”, dijo el CEO de la petrolera.
Aunque la producción de petróleo crudo ha caído por debajo de los 1,6 millones de barriles diarios, Pemex ha estabilizado sus métricas con condensados de gas natural, un hidrocarburo conocido en la industria como gasolina natural, en campos terrestres como Quesqui e Ixachi.
AMLO recortó su meta original de 2,5 millones de barriles diarios a dos millones, establecida al inicio de su administración, tras la pandemia de Covid-19 en 2020 que impactó a toda la economía global, y argumentó que su Gobierno está tratando de administrar las reservas petroleras para las próximas generaciones de mexicanos.
Pemex ha sido una de las prioridades del AMLO. El político tabasqueño ha respaldado a la compañía con inyecciones de capital para cubrir sus vencimientos de deuda, recortes a su carga fiscal, además de abultados presupuestos mientras ha recortado recursos en otras áreas de su Gobierno.