Ciudad de México — Petróleos Mexicanos, compañía estatal conocida como Pemex, evalúa la importación de hidrógeno azul y verde desde Estados Unidos en el corto y mediano plazo, según su reciente Plan de Sostenibilidad, como parte de su intento por reducir la incertidumbre de fondos y bancos que pueden financiar a la compañía, pero que exigen una estrategia ambiental, social y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés).
El gigante petrolero delineó dos oportunidades de negocio. La primera es un proyecto piloto de hidrógeno azul y verde en su refinería Deer Park, ubicada en el estado de Texas, entre 2025 y 2029.
La segunda consiste en importar hidrógeno verde desde la costa estadounidense del Golfo de México al estado altamente industrializado de Nuevo León, donde se ubica su refinería en el municipio de Cadereyta, entre 2030 y 2035.
Pemex también analiza comenzar producción nacional de hidrógeno y exportación de excedentes a partir de 2035 mediante una alianza con la empresa estatal Comisión Federal de Electricidad, conocida como CFE, la cual tiene un proyecto piloto en desarrollo.
La petrolera mexicana señaló que el tamaño de mercado del hidrógeno verde va de US$1.000 a 4.000 millones de dólares entre 2030 y 2050, pero con una política pública o marco regulatorio inexistente.
Petróleos Mexicanos contempla entrar al negocio de energías limpias con la cogeneración eficiente de electricidad y estaciones de carga para vehículos eléctricos, donde ve un mercado más grande de US$6.000 hasta US$26.000 millones con un marco regulatorio favorable.
A mitad de ese camino está el potencial de negocio del biocombustible — diésel renovable y sin considerar el etanol anhidro— valuado entre US$5.000 y US$26.000 millones.
La publicación del plan de sostenibilidad busca ayudar a Pemex a cumplir con requisitos de inversionistas que evitan exponerse a compañías sin estrategia ambiental, social y de gobernanza, (ESG por sus siglas en inglés).
El hidrógeno es un gas con múltiples aplicaciones industriales, desde refinerías hasta transbordadores espaciales. El color verde se refiere a la producción de hidrógeno con energías renovables sin emisiones de dióxido de carbono, mientras que el hidrógeno azul se produce con gas natural o derivados del petróleo pero con captura de las emisiones de dióxido de carbono.
Cero emisiones en 2050
La empresa dirigida por Octavio Romero Oropeza se comprometió a reducir sus emisiones netas de efecto invernadero a cero en 2050.
“En atención a nuestros grupos de interés, el presente documento establece el posicionamiento y el compromiso de la empresa hacia un desempeño ético y sostenible que refuerce el rol de Pemex como palanca de desarrollo y como agente de cambio en el sector energético nacional en materia de acción climática.”, señaló el CEO de Pemex en el documento.
Pemex ha enfrentado múltiples derrames, explosiones mortales y fugas masivas de hidrocarburos desde 2021 a la fecha, mientras intenta incrementar su producción petrolera y capacidad de refinación como parte de la política energética del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La petrolera más endeudada del mundo con un pasivo financiero de US$106.100 millones, prometió acabar con la quema de gas y reducir las emisiones de metano en 30% en 2030.
Para lograr la reducción, Pemex estima una inversión de su gasto de capital anual de 12% para reducir las emisiones contaminantes.