Ciudad de México — Los incentivos fiscales que el Gobierno mexicano lanzó vía decreto presidencial para sectores que quieren relocalizarse en el país son positivos para impulsar a las industrias, sin embargo, expertos señalaron que el nearshoring necesita una estrategia integral que garantice energía y agua para las empresas y que vaya más allá de lo fiscal.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dio conocer el 11 de octubre el decreto por el que se establecen incentivos fiscales para empresas de 10 sectores clave de la economía mexicana que deseen reubicarse en cualquier parte de México.
El beneficio que tendrán las empresas es la deducción acelerada de inversiones, que variará del 56% al 89% en 2023 y 2024, además, se otorgará una deducción adicional del 25% durante tres años para gastos de capacitación de trabajadores.
Los 10 sectores que incluyen este decreto son altamente exportadores: componentes electrónicos, semiconductores, baterías, motores, equipo eléctrico/electrónico, fertilizantes, farmacéutica, agroindustria, instrumentos médicos y cinematografía.
Incentivos alivian, pero preocupa agua y energía: Alejandro Torres
Alejandro Torres, socio líder de la práctica Fiscal en el despacho Von Wobeser y Sierra, dijo en entrevista que una deducción inmediata es acelerar el tiempo de la deducción del Impuesto Sobre la Renta (ISR), es decir, es un beneficio financiero para contribuyentes que inviertan en los sectores claves y pueden tomar una reducción del impuesto de manera acelerada de casi 90% del valor de lo que invirtieron.
Indicó que los porcentajes de deducción son atractivos para los sectores contemplados en el decreto y serán alivios financieros para las empresas o contribuyentes que inviertan
“Podemos decir que la parte fiscal está cubierta, pero lo que hemos visto es que algunos inversionistas tienen preocupación para decidirse entrar de pleno en el nearshoring porque ven temas pendientes de la administración: uno es la energía limpia y el otro es el del acceso al agua”
Alejandro Torres, socio líder de la práctica Fiscal en el despacho Von Wobeser y Sierra
Comentó que los inversionistas ven con buenos ojos los incentivos fiscales, pero también están preocupados por el tema energético y si se va a poder hacer eficiente la operación de sus negocios, y si hay la suficiente dotación de agua para la industria.
“Las empresas ya esperaban estos estímulos y dependiendo de donde se lleven a cabo las inversiones hay empresas que ya están platicando con los gobernadores y presidentes municipales tratando de buscar que haya apoyo en infraestructura y de una política en materia ambiental que les dé cierta seguridad”
Alejandro Torres, socio líder de la práctica Fiscal en el despacho Von Wobeser y Sierra
Incentivos fiscales no son suficientes por sí solos: Liliana Alvarado
Liliana Alvarado, directora de Ethos, dijo en entrevista que los incentivos fiscales son positivos para las empresas vinculadas al nearshoring, no obstante, anotó que el Gobierno mexicano tiene que atender otros temas que los incentivos por sí solos no pueden subsanar.
“Me parece que es positivo que estemos buscando incentivar la instalación de estas empresas, pero es importante también que consideremos una estrategia integral porque este fenómeno del nearshoring busca que las empresas se instalen en lugares donde van a requerir energía, agua e infraestructura, carreteras, puertos y también de aeropuertos”
Liliana Alvarado, directora de Ethos
Alvarado dijo que estos incentivos fiscales implicarán para el Gobierno renunciar a ingresos tributarios, es decir, los incentivos son beneficios que se les dan a las empresas, pero que le cuestan al Gobierno, en ese sentido, los beneficios fiscales le restan ingresos a la recaudación total del erario.
Consideró que el decreto presidencial también puede ser una medida política del Gobierno para mostrar apoyo a las empresas y cuestionó si los incentivos fiscales son el factor determinante para que una empresa decida relocalizarse en el país.
De los 10 sectores que se verán beneficiados por el decreto -añadió- habrá industrias más intensivas en uso de agua como la agroindustria, pero hay otras que van a ser más dependientes de energía y hay otras que demandan seguridad en las carreteras.
“Cada una tendrá necesidades distintas, los incentivos ayudan, pero tal vez no solucionan. Si pusieras en una balanza que más es lo que hubieran querido las empresas, talvez no hubieran puesto los incentivos primero”
Liliana Alvarado, directora de Ethos
Clave, atender infraestructura y seguridad: Monex
Monex dijo en una nota de análisis que la medida está claramente diseñada para impactar al segmento de nuevas inversiones, que es el menos dinámico de los componentes de la Inversión Extranjera Directa y, aunque se espera que su desempeño mejore en los próximos años, se mantiene la cautela respecto a las implicaciones que puedan desprenderse del decreto.
Apuntó que el planteamiento realizado por Hacienda obedece a un enfoque de corto plazo que podría ser limitado para proyectos de inversión con horizontes superiores a los 15 años. “Los primeros efectos podrían observarse en 2024, pero seguirá siendo clave atender las necesidades de infraestructura, seguridad y Estado de Derecho”.