Ciudad de México — México producirá aproximadamente dos millones de barriles diarios de petróleo y condensados de gas este año, estimó Rystad Energy.
En entrevista con Bloomberg Línea, Jorge León, vicepresidente senior de la consultora noruega en México, dijo que la producción ha crecido de forma limitada por encima de los 1,9 millones de barriles diarios de hidrocarburos líquidos y seguirá subiendo.
“Para este año tendremos un crecimiento de 80.000 barriles diarios anuales”, agregó.
México registró una producción anual promedio de 1,935 millones de barriles de petróleo crudo y condensados diarios hasta marzo de 2023, según los datos más recientes del regulador petrolero, la Comisión Nacional de Hidrocaburos (CNH).
Al preguntarle por la inclusión de los condensados de gas —conocidos como gasolinas naturales por su facilidad de refinación comparada con crudos pesados— en la medición, León comentó que separarlos no tiene “mucho sentido” porque al final ambos van a las refinerías y se mezclan para obtener combustibles como la gasolina y el diésel.
“Lo normal es que hablemos de crudo más condensado”, señaló el exanalista de demanda energética de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y execonomista de la petrolera inglesa BP.
Su opinión concuerda con la medición de la Agencia de Información Energética de Estados Unidos, la cual consideró recientemente que México estabilizó su producción de petróleo tras 20 años de declive.
La empresa estatal Petróleos Mexicanos, conocida como Pemex, comenzó a contabilizar petróleo y condensados de forma conjunta al inicio del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), mientras su Gobierno alineó a la CNH con funcionarios cercanos a su administración, la cual ha comenzado a alinear la medición hacia la contabilidad de Pemex.
AMLO, comos se conoce al mandatario, prometió una producción diaria de 2 millones de barriles diarios al final de su sexenio en 2024, luego de recortar su meta incial en 500.000 barriles diarios durante la pandemia de Covid-19.
El problema estratégico de México
México enfrenta un problema estratégico ante la caída en la demanda de petróleo en las próximas décadas ante la transición energética, ademas de la posibilidad de perder la ventana de oportunidad de monetizar al máximo el petróleo y gas en el subsuelo de México.
El representante de Rystad dijo que la ventaja de México es el bajo costo de producción de petróleo, el cual oscila los US$ 17,8 dólares, comparado a nivel mundial, pero tiene un problema de declinación “muy grande” ante sus campos maduros.
Pemex, productor del 95% del petróleo y condensados en México, enfrenta el declive de su principal activo petrolero, Ku-Maloob-Zaap, donde también ha sufrido dos de sus más grandes accidentes, que ha compensado parcialmente con el desarrollo de una veintena de campos prioritarios como Quesqui.
“Solo para tener una producción constante tiene que invertir mucho”, dijo.
Pero Rocío Nahle, titular de la Secretaría de Energía prevé que que haya demanda de petróleo en México hacia 2050.
Rystad Energy prevé que el precio por cada barril de petróleo llegue hasta US$102 dólares en el tercer trimestre del año ante el crecimiento económico de China pospandemia, continuidad de los recortes de la OPEP, además de mayor demanda del sector de aviación, pero en el mediano plazo, la demanda de crudo mundial seguirá desacelerando.