Ciudad de México — Con el cierre del año, las empresas mexicanas también dan vuelta a la página y fijan su atención en 2025 con proyectos de crecimiento o transformación.
Ver más: Balance 2024, las fusiones y adquisiciones en México crecen en medio de volatilidad
Aunque la probabilidad de una recesión se vislumbra lejana, la incertidumbre que en 2024 rodeó a las elecciones en México y Estados Unidos sigue sin disiparse.
La atención está concentrada en la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, programada oficialmente para el 20 de enero. Su arribo podría venir acompañado de los aranceles que ha prometido contra mercados clave como México, de acuerdo con analistas.
Los ojos de inversionistas y analistas también estarán puestos en la revisión del T-MEC y lo que México, Estados Unidos y Canadá pondrán sobre la mesa durante el proceso.
La revisión ocurrirá en un entorno con menor dinamismo económico, pero donde prevalecen las expectativas por la relocalización de empresas, fenómeno comercial conocido como nearshoring, lo que seguirá poniendo la lupa en compañías como las fibras industriales y sus grandes apuestas de crecimiento.
Ver más: Los CEO que se fueron y llegaron este año a las empresas en México
La desaparición de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), así como las nuevas políticas públicas impulsadas por la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en materia de infraestructura y vivienda también serán factores que tendrán a considerar las compañías en México.
Más allá de los factores externos, algunas empresas mexicanas concretarán este año grandes transformaciones. Conglomerados como Alfa, Grupo Elektra y Banamex tomarán decisiones clave este 2025.
Otros gigantes mexicanos como FEMSA y El Puerto de Liverpool concretarán su expansión y diversificación hacia mercados desarrollados como Estados Unidos.
