Ciudad de México — El peso mexicano, el peso colombiano y el real brasileño se posicionan como las monedas con mejor desempeño de las divisas a nivel mundial, según datos de Bloomberg y aunque su apreciación ha ayudado a disminuir las presiones inflacionarias y a incentivar el consumo, esta fortaleza podría generar algunos problemas en la economía de la región, de acuerdo con Moody’s.
“A largo plazo, las monedas fuertes podrían disuadir la inversión extranjera directa y provocar grandes déficits exteriores”, dijo el analista de la calificadora, Juan Pablo Fuentes, en un reporte.
Otro elemento negativo ante el continuo fortalecimiento de las monedas de la región son las afectaciones a diversas industrias como la manufactura.
“Las monedas fuertes encarecen la producción de bienes y servicios en relación con otros países, lo que podría perjudicar a industrias clave de América Latina como la automovilística y otras manufacturas”, escribió Fuentes.
El peso colombiano acumula una apreciación de 23,79%, el peso mexicano +17,08% y el real brasileño +11,74% en lo que va del año, de acuerdo con datos de Bloomberg. El impulso proviene del atractivo diferencial de tasas que presentan dichas naciones frente a Estados Unidos (EE.UU.).
“Al igual que México, Brasil también ha disfrutado de flujos saludables de inversión extranjera directa en el último año. Ambas economías parecen estar beneficiándose del aumento de las tensiones políticas y comerciales entre China y Estados Unidos”, dijo el analista.
El peso mexicano y el real brasileño son las divisas con mayor liquidez en la región de países emergentes, de acuerdo con la última encuesta trienal del Banco de Pagos Internacional (BIS, por sus siglas en inglés).
Diversas corredurías han alertado de una sobrevaluación de las divisas particularmente en el peso mexicano. En este sentido, Moody’s Analytics dijo que no existen fundamentos de carácter económico que respalden este desempeño, pero sí por factores financieros.
“Por ejemplo, el diferencial de tasa de interés que, aunque su atractivo no es tan alto como en Brasil, pero dada la ventaja geográfica del país con respecto al mercado más grande del mundo le permite atraer capitales”, dijo a Bloomberg Línea el director de Moody’s Analytics Latin American, Alfredo Coutiño.
Fuentes escribió que la tarea de los bancos centrales será ajustar las tasa o tipos de interés para desalentar los flujos de capital a corto plazo. “Países como Colombia, que ya tiene un gran déficit exterior, no pueden permitirse una apreciación sostenida de su moneda”.
El factor que impide que los bancos centrales comiencen a descender las tasas de interés son los niveles inflacionarios que, aún muy por arriba de los objetivos. En Colombia, la inflación reportó un alza de 12,13% en junio, mientras que su objetivo se estableció en 3%.
En México, la inflación general reportó un alza de 4,79% y la subyacente de 6,76%; sin embargo, el objetivo del Banco de México es de 3%. En el caso de Brasil, la inflación está a punto de llegar a su objetivo con un nivel de 3,16% en junio desde los 3,94% del mes previo.
“Los bancos centrales de Brasil y México podrían querer reducir su diferencial de tipos de interés con Estados Unidos en la segunda mitad del año y evitar una mayor apreciación de sus monedas”, escribió el analista de Moody’s.
Sin embargo, también destacó el papel positivo que la fortaleza de las monedas de la región como un abaratamiento en las importaciones incentivando el consumo y la inversión.
Depreciación moderada
Las expectativas de los analistas consideran que el peso mexicano cerrará el tercer trimestre del año en MXN$17,33 por dólar, de acuerdo con el consenso de analistas de Bloomberg.
Esta semana diversas corredurías modificaron sus estimados para finales de septiembre. Banorte casa de bolsa y Rabobank, una entidad financiera holandesa, estiman que la divisa local llegará a los $16,80 por unidad; mientras que Wells Fargo proyecta que cerrará en los $17 por billete verde.