Ciudad de México — Fibra Prologis, recién convertida en la mayor administradora de propiedades industriales en México tras la compra de Terrafina, estará atenta a los planes de infraestructura que tenga el Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum en el sur de México para evaluar la viabilidad de un posible desarrollo industrial en esa región.
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“Estaremos pendientes de los planes (del Gobierno) para ver qué es lo que sigue. Es un tema que tiene que pasar sí o sí”, dijo el presidente del Consejo, Luis Gutiérrez, en su primera entrevista desde la transacción que marcó un hito en el segmento de fibras inmobiliarias en el país.
Consideró que en una primera etapa, esos territorios -que se caracterizan por sus niveles de pobreza-, pueden beneficiarse de la movilización de una parte de la producción que actualmente se realiza en el norte del país y que ha comenzado a saturarse.
“De lo que se hace en el norte, puede haber cosas que tengan menos valor agregado que no necesiten tal vez una mano de obra tan calificada, y empezar a migrar algunas de esas operaciones hacia el sur”, dijo Gutiérrez para el podcast La Estrategia del Día de Bloomberg Línea, en el marco del North Capital Forum 2024 en Ciudad de México.
La presidenta Claudia Sheinbaum, quien asumió el cargo el 1 de octubre, se ha comprometido desde la campaña electoral a crear nuevos polos de desarrollo en el país, así como 100 nuevos parques industriales en todo el territorio mexicano. Durante su discurso inaugural tras la toma de posesión, se comprometió a establecer un consejo nacional con diversas cámaras y empresarios.
“Bienvenida la inversión privada y la relocalización de las empresas con innovación, buenos salarios, protección al medio ambiente y con contenido nacional”, dijo Sheinbaum.
La expansión del desarrollo industrial en México en las últimas décadas ha seguido un camino de norte a sur, iniciando con las ciudades fronterizas con Estados Unidos y siguiendo hacia el Bajío y centro del país.
Gutiérrez cree que existe una deuda con el sur mexicano, sin embargo, la clave para el desarrollo industrial de esa zona estará en el impulso a la infraestructura que realice el Gobierno para que el sector privado lo siga.
De acuerdo con el directivo, México es uno de los ganadores de un nuevo ciclo en materia de producción y cadenas de suministro global, una situación coyuntural que no depende del termómetro político de México.
“En este ciclo se trata de la resiliencia en la cadena (de suministro), no ser tan eficientes, pero ser seguros. No es tanto global, sino regional”.
El presidente de Prologis, consciente de las trabas actuales, como la necesidad de más energía limpia, consideró que el nuevo Gobierno se está dando cuenta de estas dinámicas, por lo que está poniendo los elementos para poder atender las necesidades en materia de infraestructura y energías renovables.
“Se necesita dinero del sector privado para destrabar eso”, dijo Gutiérrez, quien consideró que los recursos de las Administradoras de Fondo para el Retiro (Afores), han sido un gran mecanismo para el financiamiento del desarrollo en México.
