Ciudad de México — El impulso económico que se espera para México debido a la relocalización de las cadenas de suministro, un fenómeno mejor conocido como nearshoring, tendrá un potencial mayor si viene acompañado de unidad nacional y Estado de Derecho, dijo Carlos Slim Domit, presidente de América Móvil y uno de los herederos de la persona más rica de la región latinoamericana.
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Slim, de 57 años, señaló que México se encuentra en un momento histórico ya que la relocalización de empresas, la integración económica con América del Norte y el fortalecimiento de las cadenas de suministro están creando un entorno favorable para el crecimiento acelerado, durante el evento anual de becarios de la Fundación Telmex.
“Con unidad nacional y estado de derecho, estas dinámicas tienen un potencial enorme para generar un crecimiento fuerte y sostenido, generar más empleos, eliminar la pobreza extrema y posicionar a nuestro país en un lugar privilegiado en la economía global”, dijo Slim Domit, en donde destacó el peso, de entre 70% y 80%, de la inversión privada en el país.
El hijo de Carlos Slim Helú señaló que los últimos 40 años la economía mexicana ha crecido 1,9% en promedio anual, por debajo del 6,2% registrado las cuatro décadas previas. Actualmente, México se encuentra entre las 15 economías más grandes del mundo y es la segunda de América Latina, de acuerdo con el Banco Mundial.
Los comentarios del empresario coinciden con la discusión de las reformas impulsadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), que han generado protestas y preocupaciones de voces al interior de Estados Unidos y Canadá, socios de México en el T-MEC.
Los cambios a la Constitución tienen una alta probabilidad de aprobarse debido a los resultados electorales que dieron la mayoría calificada a Morena, el partido de AMLO, y sus aliados en la Cámara de Diputados. La coalición oficialista se encuentra a un escaño de tener la mayoría calificada en el Senado de la República.
Entre las reformas impulsadas por AMLO se encuentran la elección de jueces por voto popular y la eliminación de organismos autónomos, como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
López Obrador, quien dejará el poder el 30 de septiembre a su correligionaria Claudia Sheinbaum, defiende los cambios ya que considera acabarán con la corrupción y la intervención de los “potentados” en las decisiones públicas en contra del “pueblo”.
Carlos Slim Helú, con un patrimonio de US$86.000 millones es considerado por AMLO como un buen empresario, con quien ha mantenido diálogo, a pesar de algunas divergencias, como la relacionada con la mayor participación de militares en la administración de empresas públicas y la construcción de obras.
Slim, quién accedió al negocio de las telecomunicaciones en México tras la privatización de Teléfonos de México a principios de los años noventa, ha sido señalado de incrementar su fortuna durante la administración de López Obrador. El empresario ha rechazado haberse visto beneficiado por el gobierno lopezobradorista. Mientras que AMLO ha señalado que el incremento de la fortuna de Slim, así como de otros empresarios en México, ha sido resultado de sus política económica, que nombró humanismo mexicano.
