Ciudad de México — La electromovilidad en México busca desarrollarse en el país de la mano del nearshoring de cadenas de suministro del sector automotriz, sin embargo, enfrenta los retos del suministro de energía y la regulación, dijo Francisco Cabeza, presidente de la Asociación Mexicana de Impulso al Vehículo Eléctrico (AMIVE).
El presidente de la primera organización en México dedicada a la promoción del vehículo eléctrico y la movilidad sostenible, señaló en entrevista con Bloomberg Línea que la electromovilidad necesita un marco legal con nuevas reglas y coordinación entre todos los actores involucrados.
Al día de hoy en México el 98% de las operaciones siguen siendo en vehículos de combustión interna y 2% eléctricos, lo que hace necesario acelerar la transición energética en la víspera del año 2030, que es cuando las empresas automotrices dejarán de fabricar vehículos de combustión interna.
“Sabemos que todas las marcas automotrices ya dijeron que dejarán de fabricar vehículos de combustión del 2030 al 2050, necesitamos dejar las bases desde ahora de las políticas públicas, de la infraestructura eléctrica, de las normas y estándares de conectores para vehículos eléctricos”
Francisco Cabeza, presidente de la AMIVE
El objetivo es que México se mantenga en los primeros lugares tanto en la fabricación de vehículos como en la adopción de los vehículos eléctricos a nivel mundial. México tiene una de las 10 flotas más grandes a nivel mundial y la AMIVE considera que el país no debe quedarse con todo el rezago de vehículos de combustión porque eso va a impactar negativamente.
Pero hay retos, la energía y regulación son algunas de las principales barreras a vencer.
Francisco Cabeza expuso que, si se revisa el programa de desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional 2023-2037, lo que se encontrará es que se habla de que México tiene capacidad eléctrica, el problema es que no se menciona cuánta de esa capacidad se tendrá disponible para los vehículos eléctricos.
“¿Qué estamos haciendo para garantizar que esa energía venga de fuentes renovables? Hay muchos retos, se tiene que trabajar en identificar de dónde vamos a tener esa demanda de energía y luego ver que cada vez se consuma energía de fuentes menos contaminantes”
Francisco Cabeza, presidente de la AMIVE
En cuanto a la regulación, apuntó que se tiene el conocimiento de que hay en el escritorio del Congreso propuestas de normas que desde 2018 no se han revisado ni aprobado.
“Tendremos que seguir pidiendo a las instituciones correspondientes que existan las normas para poder facilitar esta transición de una manera ordenada que permita tener el mayor número de vehículos eléctricos circulando en el país”
Francisco Cabeza, presidente de la AMIVE
El mercado automotriz de México es uno de los más grandes de América Latina, con una producción anual de alrededor de 3,5 millones de vehículos, sin embargo, el mercado de vehículos eléctricos en México todavía está en su infancia, con solo alrededor de 20.000 vehículos eléctricos vendidos en el país hasta la fecha.
Cuestionado sobre cómo describiría este momento de oportunidad en que la electromovilidad va de la mano con la relocalización de las empresas, dijo que es “como la fiebre del oro en el viejo oeste”, es decir, hay enfrente muchas oportunidades, pero el reto es que México no las deje pasar.
“Hay 119 mil millones de dólares destinados a la movilidad eléctrica en Estados Unidos siendo nuestro vecino y no lo debemos desperdiciar. ¿Qué es lo que necesitamos? Tenemos que hacer muchas reglas, tenemos que coordinarnos y trabajar en unidad. Tenemos que unir todos los monólogos que hay en el país para tener un diálogo en común”
Francisco Cabeza, presidente de la AMIVE
Francisco Cabeza entró en funciones de su nuevo cargo como presidente de la AMIVE durante el foro Latam Mobility México 2023 que se realizó el 10 y 11 de octubre en Ciudad de México.