Ciudad de México — La supermayoría de Morena y aliados en la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma constitucional que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador para que el Ejército controle a la Guardia Nacional, en medio de advertencias sobre el riesgo de militarización de la seguridad pública.
La reforma se trata del segundo intento de López Obrador en su sexenio para que la Guardia Nacional, un cuerpo de seguridad pública civil que este 2024 cumplió cinco años de creación en sustitución de la Policía Federal, sea controlada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
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Con 362 votos a favor, 133 votos en contra y cero abstenciones, fue aprobada en lo general, y tras ocho horas de discusión, la reforma en materia de Guardia Nacional, por lo que consiguió la mayoría calificada que se necesita legalmente para modificar la Constitución.
Los diputados de Morena y sus aliados del Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde (PVEM) avalaron la reforma de AMLO, como se le conoce al presidente, a pesar del antecedente: en abril de 2023 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) invalidó por inconstitucional una reforma presidencial que daba al Ejército el control de la Guardia Nacional.
Tras la invalidación de la Corte, AMLO avisó que volvería a enviar una reforma en la materia en septiembre de 2024, cuando entrara en funciones una nueva Legislatura con mayoría calificada de Morena y aliados. La profecía de Obrador se cumplió y la reforma avanza en el Congreso con miras a ser promulgada en los últimos días del sexenio.
El dictamen aprobado reforma y adiciona los artículos 13, 16, 21, 32, 55, 73, 76, 78, 82, 89, 123 y 129 de la Constitución Política de México, en materia de Guardia Nacional.
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A las 3:36 horas del viernes 20 de septiembre, la reforma presidencial quedó aprobada en lo particular con 353 votos a favor y 126 votos en contra, con lo que se obtuvo la mayoría calificada después de una sesión total de 15 horas.
La Cámara de Diputados turnó al Senado el dictamen para su aprobación, a fin de que después sea enviada a los congresos estatales para su aval y finalmente pueda ser promulgada por el presidente López Obrador en el ocaso de su sexenio.
Morena aprueba reserva que profundiza rol del Ejército en Guardia Nacional
En las primeras horas de este viernes 20 de septiembre, Morena y sus aliados aprobaron la única reserva que se admitió a discusión durante el debate de la reforma en materia de Guardia Nacional. La modificación sugerida al dictamen generó cuestionamientos de la oposición.
La reserva fue propuesta por la diputada de Morena, Merary Villegas, quien es originaria de Culiacán, Sinaloa, una ciudad que suma más de 10 días con una ola de violencia protagonizada por el crimen organizado a raíz de la detención en EE.UU. del narcotraficante mexicano Ismael ‘El Mayo’ Zambada.
La diputada propuso modificar el párrafo décimo segundo del artículo 21 del dictamen para precisar que la Federación contará con la Guardia Nacional como una fuerza de seguridad pública integrada por “personal militar” con formación policial. Esta propuesta eliminó la posibilidad de que la Guardia Nacional estuviera integrada también por personal “de origen marino”.
Merary aseguró que la reserva que presentó busca que la Ley retrate de manera más fiel el espíritu de la reforma a la Guardia Nacional, “se busca fortalecer el dictamen”.
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Rubén Moreira, diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dijo que la reserva aprobada plantea que la Guardia Nacional será una corporación de carácter militar encuadrada en la Sedena, “esto es ya hacer, con todas sus letras, una Guardia Nacional de carácter militar”.
Gibrán Ramírez, diputado de Movimiento Ciudadano (MC), señaló que “es una reserva del descaro. Se la pasaron diciendo que no se trataba de militarizar la seguridad pública ni la vida pública de México y ahora se plantea como tal”.
Germán Martínez, diputado del Partido Acción Nacional (PAN), apuntó que se le está dando el carácter de Fuerza Armada permanente a la Guardia Nacional, “le quieren imponer (a la futura presidenta, Claudia Sheinbaum) un Ejército a la medida de la Sedena de ahora, sí, del secretario de ahora”.
Oposición y mayoría de Morena se confrontan por “militarización”
El debate de la reforma sobre la Guardia Nacional se elevó de tono cuando el diputado del PAN, Miguel Ángel Monraz, subió a tribuna para argumentar en contra de la propuesta acompañado de sus correligionarios que mostraron cartulinas con fotografías de AMLO y de liderazgos de Morena cuando estaban en contra de la militarización.
En esas fotografías AMLO; el presidente nacional de Morena, Mario Delgado, y la secretaria general de Morena, Citlali Hernández, sostenían con sus manos carteles en contra de la militarización de la seguridad pública en los sexenios de los expresidentes Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
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“Es perverso que los potentados utilicen al ejército para enfrentar el problema de la inseguridad que ellos crearon por dedicarse a saquear”, escribió AMLO en Twitter el 19 de febrero de 2013.
Ricardo Monreal, coordinador de los diputados de Morena, pidió a la oposición subir el nivel del debate y respeto a los legisladores, pero dijo que se defenderán cuando se agravie al presidente López Obrador.
Monreal hizo uso de la tribuna luego de que la diputada del PAN, Paulina Rubio, transmitió un audio de AMLO cuando éste era opositor al régimen. En el audio de hace años, Obrador pensaba que “no es con el Ejército como se pueden resolver los problemas de seguridad y de violencia, no es así con medidas coercitivas”.
Sergio Luna, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, dijo que la reforma amplía la jurisdicción de la Guardia Nacional, y a su vez, este cuerpo pasa a formar parte de la Sedena con el fin de ejecutar la Estrategia Nacional de Seguridad Pública.
Por otra parte, mencionó que se faculta al Congreso para expedir leyes que regulen y establezcan requisitos y límites para la participación del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, en materia de seguridad interior y en tareas de apoyo a la seguridad pública.
Diputados de Acción Nacional, del PRI y Movimiento Ciudadano presentaron mociones para suspender el proceso de dictaminación en la Cámara baja, sin embargo, la supermayoría las rechazó y continuó la discusión.
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Ricardo Mejía, diputado del PT y subsecretario de Seguridad Pública en la gestión de AMLO (junio de 2019 – enero de 2023), dijo que la reforma quiere blindar a la Guardia Nacional y fortalecerla, y destacó que la agrupación actualmente se integra por 130.000 elementos, número superior a los 35.000 elementos de la Policía Federal de gobiernos anteriores.
“Quienes hoy hablan de la militarización como espantapájaros, quiero recordarles que el comandante supremo de las Fuerzas Armadas es un civil. Hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador, mañana la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, ese es el comandante de nuestras fuerzas armadas”, sostuvo Mejía.
Los riesgos de la Guardia Nacional bajo el mando del Ejército
Laura Ballesteros, diputada de MC, dijo que la mayoría oficialista intenta tocar la Constitución para militarizar todos los ámbitos y decisiones de la vida pública como infraestructura, energía, aeropuertos, salud, educación y, por supuesto, seguridad.
“Hoy intentan nuevamente imponer su constitucionalismo abusivo con la reforma para consumar la militarización de la Guardia Nacional”, afirmó Ballesteros.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) ha advertido sobre los riesgos del renovado protagonismo castrense. Aunque la llegada a la Presidencia de López Obrador generó expectativas sobre una gradual desmilitarización de la seguridad pública, muy pronto éstas se terminaron.
“La militarización durante el actual sexenio alcanzó una profundidad legal no vista antes, impulsada por la creación de la Guardia Nacional, una serie de cambios jurídicos y una utilización extensiva de las Fuerzas Armadas para labores distintas a su función constitucional ordinaria”, suscribe el Centro.
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Edith Olivares Ferreto, directora ejecutiva de Amnistía Internacional México, hizo un llamado a los diputados previo a la votación de la reforma, para que rechazaran la iniciativa que pretende adscribir la Guardia Nacional a la Sedena.
La aprobación de dicha reforma, de acuerdo con la organización, significaría la culminación de un proceso que ha venido dándose, de facto, la militarización de la seguridad pública del país y un “grave retroceso” en materia de derechos humanos.
“Hay riesgos para la vigencia y protección de los derechos humanos que representa la militarización. No es la solución”, dijo en un video transmitido en la cuenta de X (antes Twitter) de la organización.
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México Unido Contra la Delincuencia (MUCD) pidió al Congreso rechazar la reforma de la Guardia Nacional que perpetúa la militarización.
MUCD advirtió que, con la reforma, la Presidencia de la República podría disponer de las Fuerzas Armadas en cualquier tarea que le ordene, no únicamente en tareas de seguridad pública. “Esto aceleraría el proceso de militarización del país”.
Asimismo, reiteró el llamado al Congreso a no aprobar la reforma y a defender los límites sobre la participación de las Fuerzas Armadas en tiempos de paz, ya que de aprobarse se perderá la subordinación que debe existir ante las autoridades democráticamente electas.
Esta historia fue actualizada a las 5:12 horas del viernes 20 de septiembre, se agrega del séptimo al décimo quinto párrafos.
