Bloomberg — Crédito Real presentará la siguiente semana un acuerdo de insolvencia preempaquetado en un tribunal federal mexicano, de acuerdo con personas con conocimiento del tema, como un intento por resolver el colapso de la mayor prestamista de nómica mexicana.
Los acreedores proporcionaron a la compañía esta semana documentación que muestra que los tenedores de más del 50% de los bonos de US$1.900 millones de Crédito Real habían aceptado el acuerdo, lo que permite que la presentación avance, dijeron las personas, que solicitaron el anonimato ya que las conversaciones son privadas.
Los representantes de la empresa y un grupo de acreedores que dirige el acuerdo no respondieron a las solicitudes de comentarios.
El llamado concurso mercantil dará lugar a la liquidación de los activos restantes del prestamista, dijeron las personas, añadiendo que podría retrasarse más allá de la próxima semana.
La presentación pretende poner fin a un proceso de quiebra que ya se está desarrollando en los tribunales estadounidenses.
La quiebra de Crédito Real en febrero de 2022 formó parte de una oleada de impagos por valor de más de US$5.000 millones por parte de los prestamistas no bancarios del país, ligeramente regulados, que ha dejado al sector fuera de los mercados mundiales de capitales.
Según el plan que se va a presentar, que se propuso originalmente en mayo, los préstamos restantes de Crédito Real se colocarán en un fideicomiso que será supervisado por un juez mexicano. Los tenedores de bonos recibirán pagos del fideicomiso a medida que se cobren esos préstamos, y la empresa estima ahora una recuperación de unos 22 centavos de dólar en tres años, 1 centavo menos de lo que había previsto anteriormente.
Alrededor de la mitad del total se pagará en el primer año, según un documento publicado esta semana en el sitio web de la empresa. Los pagarés con vencimiento en 2028 reflejan ese desembolso, cambiando de manos esta semana a 11 céntimos, según datos de Trace.
Antes de la quiebra, Crédito Real tenía una cartera de préstamos de unos 53.400 millones de pesos (US$3.100 millones). Quedan unos US$420 millones de activos, según las últimas estimaciones publicadas esta semana, que datan de finales de julio.
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