Bloomberg — La candidata a la presidencia de México del partido Morena, Claudia Sheinbaum, dijo que prevé que la deuda de Petróleos Mexicanos, la petrolera más endeudada del mundo, sea refinanciada antes de los próximos vencimientos de bonos en 2025.
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“Bueno, tiene que ser necesariamente el 2025, porque hay una parte de vencimiento de la deuda que se viene el próximo año, y tenemos que trabajar en ello”, dijo en una entrevista a Bloomberg News durante la Convención Bancaria anual de México. El plan “muy probablemente nos los va a dejar ya el actual director de Pemex y el presidente en un esquema de largo plazo”.
Analistas e inversionistas coinciden en que el destino de Pemex será uno de los mayores retos que heredará el próximo presidente de México. La deuda de la empresa ronda los US$106.000 millones, de los que US$6.800 millones vencen en 2025.
Sheinbaum, ex jefa de Gobierno de Ciudad de México del partido gobernante Morena, se ha posicionado como sucesora natural del presidente Andrés Manuel López Obrador. La popularidad de AMLO, como se conoce al presidente, la ha ayudado a mantener un 58% de la intención efectiva de voto, según el Barómetro Electoral Bloomberg, antes de las elecciones del 2 de junio.
Agregó que su equipo tendrá que construir sobre el plan que deje la actual Administración y dirección, estableciendo un calendario para que Pemex desarrolle otros planes de negocios.
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“Hay que trabajar en dos esquemas. Por un lado, el refinanciamiento de la deuda y permitir que ese refinanciamiento esté asociado tanto a la producción de petróleo, la refinación del mismo y al mismo tiempo, la entrada de Pemex a otras fuentes de energía o a otros esquemas de generación eléctrica”, agregó.
La producción de petróleo y gas de Pemex ha caído a menos de la mitad de lo que era hace dos décadas. Para recuperar su producción, la reducción de la deuda es clave ya que el dinero que podría destinarse a reparar su infraestructura se utiliza en cambio para cubrir facturas impagas e intereses. La deuda de la empresa también ha impedido en gran medida su acceso al mercado, y la refinanciación de los bonos podría resultar costosa, ya que las tasas de interés mundiales siguen altas.