Ciudad de México — La Comisión Federal de Electricidad, empresa estatal conocida como CFE, consideró que no es factible el uso de hidrógeno verde para producir electricidad en México.
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Jorge Musalem, gerente de proyectos estratégicos de CFE, dijo que tras un análisis al interior de la compañía se determinó que su implementación no es factible, durante su participación en el Future Energy Summit 2024.
“Hemos llegado a la conclusión de que el hidrógeno verde como solución para proyectos de generación (eléctrica) no es factible en México”, dijo Musalem
En primer lugar, el directivo comentó que las turbinas de una planta de ciclo combinado de gas y vapor no admiten mezcla, por lo que requerirían inversión para turbinas nuevas que puedan admitir el combustible limpio.
El hidrógeno verde se produce mediante electrólisis, un proceso químico que consiste en la separación de elementos mediante electricidad con tecnología renovable, el hidrógeno que hay en el agua en este caso.
Para el directivo, generar hidrógeno con electrólisis y luego usarlo como combustible para generar más electricidad es un ciclo que “no nos cuadra”.
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CFE tiene un proyecto piloto de hidrógeno verde pendiente de arrancar operaciones desde 2023.
Bloomberg Línea buscó al directivo tras su participación en el evento, pero pidió coordinar una entrevista posterior con el equipo de comunicación de CFE.
El directivo de CFE mencionó que sí hay una “gran oportunidad” para proyectos de hidrógeno verde en el transporte vehicular para reducir las emisiones contaminantes, pues el autotransporte contribuye en casi la misma cantidad de contaminantes que la producción de electricidad en el país.
Musalem recordó la importancia de las energías limpias en México en los próximos 15 años.
El programa de adiciones y retiros de centrales eléctricas de México requerirá 65.000 Megawatts de todas las tecnologías a 2037.
Para alcanzar la meta de 40% de energías limpias en México hacia 2030, el país necesitará inyectar al sistema 73 GigaWatts-hora, US$35.000 millones de inversión en tecnología renovable equivalente a 35.000 MW, además de las inversiones en redes eléctricas y almacenamiento para admitir la nueva generación.
“Desde el punto de vista de oportunidades que se abren con el nearshoring para las renovables, creo que lo fundamental es estar localizados aquí primero para atender la demanda de corto plazo que implica este crecimiento en Estados Unidos”, dijo Musalem
En segundo lugar, el directivo mencionó la necesidad interna de México en renovables con la directriz de Cenace (Centro Nacional de Control de Energía) para indicar dónde se necesitan las plantas y evitar lo que pasó con las subastas eléctricas en el sexenio del expresidente Enrique Peña Nieto, donde se colocaron sin planeación y donde las empresas privadas querían, señaló.
Esta historia se precisó en el título, primer y octavo párrafo a las 11:27 pm, tiempo de la Ciudad de México.
