Ciudad de México — Los principales bancos en México mantienen perspectivas positivas sobre la demanda de crédito para la segunda mitad de 2024, pese a la desaceleración de la economía y el incremento en la volatilidad que se espera por el cambio de Gobierno y las elecciones en Estados Unidos.
BBVA, Banorte y Santander, los tres bancos de mayor tamaño en el país por activos, apuntaron a la resiliencia del consumo, los niveles de empleo y el nearshoring como algunos factores detrás del optimismo.
“Tenemos bastante confianza en el hecho de que el crecimiento de los préstamos a doble dígito vendrá, como lo ha hecho cada año en los últimos 10 a 15 años”, dijo Onur Genç, CEO global de BBVA, durante una llamada con inversionistas en julio.
BBVA México registró un incremento de 13% anual en su cartera de crédito al cierre de junio, a MXN$1,75 billones.
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Genç agregó que si bien habrá volatilidad por el cambio de administración a nivel local que ocurrirá el 1 de octubre y las elecciones presidenciales en Estados Unidos en noviembre, se mantienen positivos sobre México a futuro por los fundamentales del país y la fortaleza de la institución financiera.
Para Banorte, la incertidumbre asociada con estos dos eventos llevó a recortar su proyección de crecimiento para la economía mexicana de 2,4% a 1,9%. El banco prevé que la demanda interna seguirá siendo el principal motor del crecimiento, tanto por el consumo como por la inversión privada, parcialmente impulsada por el nearshoring.
“Sin embargo, mantenemos una perspectiva optimista para nuestro crecimiento potencial de crédito en el año, ya que vemos un sólido pipeline de proyectos e inversiones con nuestros clientes”, dijo Marcos Ramírez, CEO de Banorte, en una llamada con inversionistas el 24 de julio.
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La cartera de crédito total del grupo financiero mexicano creció 13% anual en el segundo trimestre del año, a MXN$1,11 billones.
El CEO de Santander México, Felipe García Ascencio, consideró que aunque se observa un poco menos de dinamismo, la economía viene mejor de lo que se estimaba y prácticamente todos los indicadores, como los niveles de empleo, el consumo y la inversión nacional y extranjera.
“No vemos mayor sobresalto de aquí al cierre del año”, dijo el directivo a medios de comunicación durante un evento a mediados de julio.
El directivo mencionó que el nearshoring ha dado impulso tanto al crédito empresarial como al de personas, en particular de quienes trabajan en las empresas que están realizando inversiones y que piden productos de crédito.
La cartera de crédito de Santander México fue de MXN$874.313 millones al cierre de junio, lo que significó un incremento anual de 6,5%.
En una publicación de análisis reciente, el área de estudios económicos de Citibanamex estimó que el crédito bancario se desacelerará en la segunda mitad de 2024, al igual que la actividad económica y cerrará el año con un crecimiento de 3% anual.
