Ciudad de México — Los auditores externos de Grupo Vasconia, una empresa mexicana de productos de aluminio con más de 100 años en operación, alertaron que la situación financiera de la compañía podría generar dudas sobre su capacidad para funcionar normalmente.
Los auditores de BDO Castillo Miranda y Compañía confirmaron los problemas de liquidez, vinculados a la subsidiaria industrial Almexa, y que llevaron a Vasconia a suspender el pago a acreedores e iniciar una negociación con miras a una reestructuración, un proceso que aún está en marcha, informó la propia compañía en un comunicado distribuido en la Bolsa Mexicana de Valores.
Debido a la existencia de cláusulas de incumplimientos cruzados, la deuda bursátil y bancaria de largo plazo de Vasconia fue reclasificada a corto plazo, es decir con un año o menos de vencimiento, lo que está generando una posición negativa de capital de trabajo, de acuerdo con la observación de los auditores que fue compartida por Vasconia.
Los estados financieros auditados del 2023 están sujetos a la aprobación de la Asamblea General Ordinaria de Vasconia, y posteriormente serán divulgados.
En febrero, Vasconia alertó de una disminución significativa en sus índices de liquidez, solvencia y rentabilidad debido a la debilidad en el mercado de aluminio y la “inusitada” fortaleza del peso mexicano frente al dólar, que encareció sus costos.
Al cierre del 2024, la compañía mantenía MXN$176 millones en caja (aproximadamente US$10,5 millones), sin cambios con respecto al saldo que mantenía hasta el tercer trimestre. La deuda de la empresa era de poco más de MXN$1.800 millones (US$105,5 millones).
Entre sus acreedores se encuentran Banco Sabadell, HSBC, Santander y Actinver. A ellos se suman a los tenedores de sus certificados bursátiles VASCONI19 y VASCONI22.
