Bloomberg — El equipo de la candidata presidencial Claudia Sheinbaum está discutiendo si el país debería reactivar las subastas de proyectos de electricidad y petróleo para ayudar a financiar sus enormes necesidades energéticas.
La necesidad de inversión para aumentar la capacidad significa que los actores privados posiblemente podrían desempeñar un papel más importante en el sector de energía, dominado por el Estado, dijo Diana Alarcón, una de las colaboradoras más cercanas de la candidata.
“En un país que está creciendo y cuya demanda se va a expandir, el margen es gigante para ambos, para el sector público y el sector privado”, dijo Alarcón, quien se ha convertido en una persona de referencia para inversionistas visitantes que buscan información sobre la probable próxima Administración.
La campaña comienza formalmente el 1 de marzo. La candidata, que se presenta por el partido de López Obrador, Morena, para las elecciones del 2 de junio, no se ha comprometido con subastas u otras políticas energéticas específicas, ni ha publicado un manifiesto detallado.
El actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, revirtió medidas de administraciones anteriores que apuntaban a abrir el sector al capital privado e intentó fortalecer el papel de la estatal Petróleos Mexicanos.
La tradición nacional de una fuerte presencia estatal en el sector para garantizar una soberanía energética no cambiará si Sheinbaum gana las elecciones, dijo Alarcón en una entrevista en Ciudad México.
El equipo de la candidata también está analizando un incremento a las exportaciones de energía, como mercados en Asia y Europa, indicó Alarcón.
Este mes, la Suprema Corte de Justicia de México anuló una legislación eléctrica de López Obrador que privilegiaba a la empresa estatal sobre los productores privados.
Sheinbaum tiene una ventaja de 16 puntos porcentuales sobre su rival más cercano, según una encuesta reciente.
Cuando Sheinbaum fue alcaldesa de Ciudad de México, entre 2018 y 2023, contrató a Alarcón como asesora principal y coordinadora de asuntos exteriores, aunque ambas se conocen desde que eran activistas, a fines de la década de los setenta.
Oportunidad del nearshoring
El equipo de la candidata está interesado en fortalecer la tendencia del nearshoring, donde empresas desde proveedores de Tesla Inc hasta Mercedes Benz Group AG, como la taiwanesa Quanta Computer Inc, abren plantas en México para estar cerca de Estados Unidos y su gigantesco mercado de consumo.
Su equipo quiere garantizar que las nuevas inversiones en México conduzcan a un trabajo de mayor valor en lugar de simplemente el montaje. Los grupos de planificación han discutido la construcción de infraestructura de vivienda, salud y educación en torno a proyectos de nearshoring como una forma de mejorar la retención de trabajadores calificados.
La relación con EE.UU. sigue siendo una piedra angular de la política exterior mexicana, dijo Alarcón, quien oficialmente se concentrará en coordinar grupos de trabajo de política exterior durante la campaña. Mientras México, Canadá y EE.UU. se preparan para su acuerdo comercial T-MEC que se revisará en 2026, el país buscará modificaciones para apuntalar las cadenas de suministro regionales, agregó, sin dar más detalles.
Es “un matrimonio que no tiene divorcio. Es decir, como en toda relación cercana, uno tiene que saber lidiar con las diferencias”, dijo Alarcón.
